Hoy tengo el reto de escribir 4 blogs sin tener apenas ideas para escribirlos. No sé de qué hablar aquí, qué cosas sacar a relucir. Puedo ponerme poético pero no decir nada más que la mañana y las esquinas de la calle triste. Puedo hablar de algunos políticos y de lo que yo pienso de la política. Puedo hablar de hábitos, deseos o caprichos que tiene la gente. Puedo hablar que estoy encerrado en menos de un kilómetro cuadrado, que no voy a ningún sitio desconocido. Pero no hablo de nada, ya que a mi alrededor no pasa nada. Si yo hubiese corrido alguna aventura en el pasado o en el presente, tendría de qué hablar, pero siendo que mi vida es repetición de repetición, ¿qué coño diré?

Parece que la vida del común de los mortales es repetición.

Maldita repetición.