Hubo una vez un hermano de un tío que me necesitaba para aparcar el coche en zona blanca, para no pagar la zona azul. Me subía a su coche y le indiqué esa zona blanca, por detrás de la iglesia. Al venir de allí nos juntamos con ese tío mío y otras personas. Entonces mi tío preguntó:
-Cómo habéis venido, ¿a pie o andando?
Como yo estaba un poco harto de estas bromitas de mi tío, dije:
-Hemos venido tocándonos los huevos.
Todos se me quedaron mirando. Pero luego fueron a donde tenían que ir y me dejaron. He estado pensando esas palabras mías toda la mañana, como culpabilizándome de haberlas dicho. Me he obsesionado un montón con esas palabras y no tiene mucho sentido. Las escribo aquí a ver si se me pasa la obsesión. Menudo rollo.
Obsesión, culpa:
a veces van relacionados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario