domingo, 28 de noviembre de 2021

 Está pasando la tarde como pasa y pasamos todos, sin pena ni gloria. Ya es de noche y son las seis y veinte. Inventan inventos y a los tres días, está la gente hasta el bolo de los inventos. La gente se viste bien y la otra gente que les ve tan elegante, dice, con acierto: menudo cabrón o menuda hija de puta. Y no los vale tanta ropita de marca para dar el pego, que es lo único que hacen: pasar por gente bien. Para pasar por gente bien lo que hay que hacer es: si no haces nada bueno, por lo menos, no hagas daño. Y ahí sí que no hay trucos, pero la gente que se siente envanecida por los aplausos (no hablo de los payasos que son necesarios para una verdadera nación o de los actores o de los bomberos) sino de esa gente que se cree que va a salvar el mundo o va a cambiar la nación, esa gente que debería estar encerrada en el psiquiátrico hasta que se cure de su megalomanía, esa gente que vemos en los telediarios hablando como curas o como cristos de una nueva y falsa religión. Esos, digo, que se envanecen con los aplausos y gracias a esa gente que los aplaude se cree que tiene la posesión total de la verdad, debería irse a su casa y pasar la tarde sin pena ni gloria, sin pena ni gloria.

Esta mañana hacía un frío de mil demonios. El abrigo apenas me cubría de ese helado aire que venía por la calle. Solo he ido a comprar el periódico, que hablaba de bellacos y sus bellaquerías. No hay más que gentuza gobernándonos. Pero las horas pasan pronto y así los días y todo pasa y llegará la hora en que cambien las tornas. Es así: unos entran, adoptan unas ideas y las quieren poner en práctica. Todo sale bien o mal, según sean esas ideas y luego, vienen otros y practican otras ideas que salen bien o mal, según estas sean de buenas o malas. La vida da oportunidad hasta al más asqueroso engendro que pasaba por allí. Pero luego, todo se le vuelve en contra por eso, por ser un vil canalla que no hace más que daños. No tardando, se le verá a la camisa los hilos de que está hecha y una porrada de tiempo pondrá a cada villano en su rincón. Los días pasan, el año pasa y nosotros veremos poco a poco cómo los delincuentes y los terroristas pasarán de moda de modo que se les dará su merecido. Pues no hay gente tan tonta que repita dos veces de una ración de mierda. O a lo mejor, sí. Hay gente como las moscas, a la que le gusta mucho  la mierda.

sábado, 27 de noviembre de 2021

 Se acerca la navidad. Yo no expreso la navidad exteriormente: regalos, nacimientos y árboles. No tengo nadie a quien hacer regalos ni quiero que me hagan regalos a mí: así lo veo yo. La felicidad que viva con mis padres me vale. Y con Paco. Los demás, pueden ser prescindibles. Me da más amor mi madre o mi padre charlando y dándome algún consejo que todos aquellos que buscan en la navidad excusas para acrecentar su materialidad: un trasto más, una prenda más, un juguete más. Eso es propio de la mirada horizontal, perruna o puerca. Ya le hacemos al planeta bastante daño para que gastemos más agua y más recursos para fabricar unos pantalones o demás parafernalia de señoritos y señoritas elegantes. Además, que yo creo que la elegancia está dentro de uno mismo, no exhibiendo ropa de marca. Puedo regalar tiempo (que me sobra mucho), algo de cariño y mi propia persona. Como estos aspectos de la persona no están valorados suficientemente, pues me los guardo por si hay una ocasión de lucirlos. La gente no se ve en todo el año y no se regala presencia y cordialidad sino objetos. Pues muy bien: con su pan se lo coman. Prefiero una charla amena con los que me quieren que no un montón de baratijas con que llenar el armario. 

Se ha muerto Almudena Grandes. Es una escritora que siguió los pasos de su amado Galdós. Yo creo que era de las de pensamiento horizontal pero espero que esté en algún lado de la esfera celeste aunque sea solo por las buenas novelas que escribió.

Se pasa la tarde con los padres. Los padres cuentan cosas antiguas de cuando había fidelidad, amor y respeto por los mayores. Se cuentan historias de aquellos que criticaban a los poderosos, pero que, en caso de apuro, recurrían a los poderosos que tanto criticaban para enchufarse en una empresa o para solucionar algo con la administración. Esta gente era roja de boquilla porque tenía más que agradecer a su familia franquista que a ningún rojo. Eran gentes estas que las piaban mucho de cara a la galería y votaban a los rojos y se les llenaba la boca de encomio para los gobiernos socialistas, pero que lo que habían conseguido en sus vidas se lo debían a un tío franquista que les enchufó ya para toda la vida. Qué contradicción. Yo me he sacado la plaza de profesor yo solo, sin ayuda de nadie y a mí estos rojillos no me dan lecciones de nada. Son lo más cínico que existe en la Tierra. Menudos hipócritas. Encima tienen la mirada perruna que no llega al cielo ni a Dios. Se declaran ateos y no saben ni lo que quiere decir el ateísmo. Son gente incoherente, caprichosa y fea de alma.

 La mirada horizontal sobre el mundo es perruna o de cerdo, pues estos animales no miran nunca hacia arriba y, según la filosofía hindú, es en lo que se convierten estos humanos cuando mueren, ya que han dedicado muy poco tiempo a su alma o simplemente, no tienen alma, no mueren bien. La mirada vertical del mundo hace que se crea en un ser superior, llamémosle Dios, que nos ha creado a todos iguales. De ahí, de esa mirada vertical, nace el respeto a las demás personas, incluso a las de mirada horizontal. A estas personas que no alzan la mirada les es difícil abandonar este mundo porque es lo único que conocen: lo material, las cosas, el vil metal, los placeres y los vicios. Los de mirada vertical ven algo más allá de este mundo, son espirituales, reconocen que son poca cosa y respetan a los demás como obra de Dios que son ellos mismos. Y no hacen nada en contra de las demás personas porque las creen divinas y no se meten a hacer daño a otras personas porque lo creerían una ofensa a Dios, a ellos mismos y a las demás personas. Los de pensamiento o sentimiento vertical aspiran, al morir, a otra vida que no es esta perruna, puerca o material, el mundo de las cosas. Aspiran a que su alma permanezca, por eso son respetuosos, perdonan ofensas y se muestran buenos con los demás. 

 Hay dos modos de entender el mundo. Una manera es la mirada horizontal de verlo, solo se ve las cosas materiales, solo se ven cosas, dinero y poder sobre los demás. No se ve en esta mirada horizontal ningún reparo en hacer daño al otro si va en interés de esos que no alzan la mirada. Estas personas se declaran ateas y lo que son es psicópatas que no tienen por el prójimo el menor miramiento. Todo es susceptible de usarse y dejarlo tirado después. No hay en esta mirada respeto hacia al otro. Son gente que se preocupa muy mucho de sus placeres, como si fueran cerdos, pero se ocupan poco de lo que puedan pensar los demás. Los demás piensan de ellos que son unos desahogados, unos caraduras, pero estas apreciaciones de los demás no les importa en absoluto. Estas personas de pensamiento horizontal siempre están huraños, pensando inquinas contra el prójimo, usando a los demás, nunca están alegres, siempre tienen un mohín de disgusto en la cara porque este mundo no satisface los gustos y deseos de poder y de dinero que quisieran. Son gente falsa, que va por detrás y que va ensuciando la Tierra.

Tu vida o te la organizas o te la organizan otros que saben más que tú. Bueno. No es que sepan más que tú, sino que solo miran el interés y van a tiro fijo. No les importa que tú padezcas de esto o de lo otro o que tú pienses de una manera o de otra. Simplemente se meten en tu vida sin pedir permiso e intentan arreglártela, pero como no saben nada de tu vida, te perjudican. Puede ser la sociedad la que te organice estos líos o puede ser un familiar sin escrúpulos o puede ser alguien ajeno a ti que sabe hacerte la puñeta. Es igual quién se meta en tu vida para jodértela porque ellos (los que se meten en todo) tienen una idea del mundo bastante limitada: solo piensan en lo material, son gente que no tiene moral de ningún tipo, son gente para la que tú no eres un persona digna de aprecio sino un títere a quién manipular. Son gente psicópata en muchos casos que, una vez que te han enfilado, ya no  paran de joderte la vida, manejarte, asustarte y tenerte bajo su mandato. La pena es que son ignorantes de todo, todo lo trabucan y malinterpretan porque no saben de nada más que de lo que se toca con las manos, no tienen ética, no tienen escrúpulo al hacer el mal a los demás. Por eso te organizan la vida: porque tu vida les importa una mierda. Por eso se meten en tu vida: porque tu vida les importa muy poco. Solo les importa qué cosas obtendrán al manejar tu vida. 

jueves, 25 de noviembre de 2021

 En política hay que saber distinguir entre adversarios y enemigos. Este gobierno solo quiere enemigos. Desde la caída del muro de Berlín, hay una tendencia política que se basa en la división de la sociedad de modo que no se puede hacer comunidad entre la gente, sino que toda idea se basa en polarizar la política de modo que solo haya dos opciones: o la extrema izquierda o la extrema derecha. Todos somos fascistas en cuanto no somos feministas y todos somos enemigos en las redes sociales que están llenas de zascas: que si un diputado ha criticado a un dirigente; que si uno de la oposición ha fulminado a uno del gobierno y viceversa. Tendrían los políticos que llegar a puntos en común, pero no lo hacen. Siguen con la idea del enemigo: el que no piense como yo, es mi enemigo. La guerra de los sexos está servida. La guerra económica está servida y la guerra de las autonomías está servida. Así todos los días. ¿No habrá un político que tenga más miras hacia el futuro que nos salve de esta dicotomía fascismo/progresismo? Todos los días igual: unos se arrogan el progreso de la nación y la van hundiendo poco a poco y otros siguen dinamitando cualquier punto de encuentro. No debería ser así la política, llena de mentiras para desacreditar al enemigo, sino ver en la otra postura política una forma de pensar tan digna como la que hay en el gobierno.

 En una cacerola, he echado migas de pan duro. En otra cacerola, he puesto agua con una pastilla de caldo. He pelado ajos, que luego hay que picar fino. He cortado en daditos unas tiras de jamón: total, que voy a hacer unas sopas de ajo. Hacía mucho que no las cocinaba. Por otro lado, a mí este gobierno no me gusta. Sigue los pasos desastrosos de ZP. La nación, "discutida y discutible"; la economía, por los suelos. Apoyos de la periferia para discriminar a todas las demás autonomías. Eso es, me huele a ZP. Lo inútil y penoso que fue este dirigente, ya lo sabe la historia de España. Ahora, vienen otros a seguir su estela de bancarrota y de malestar social. Yo debo seguir a lo mío: escribir las historias que me inventé tiempo ha, caminar todos los días un poco o un mucho para mantenerme en forma y estar con los amigos para reírse un poco de la vida. Todos los malos políticos que se juntan en el congreso me dan igual: van a lo suyo, a cobrar de los españoles su sueldo y les importa poco si el AVE va a Extremadura o no va. Menudo rollo se traen los políticos. Yo creo que el 70% de la gente ya no sigue la actualidad política porque le asquea tanto rollo para nada. Bueno: voy a hacer unas sopas de ajo que no me las quita nadie.

martes, 23 de noviembre de 2021

 Tomas Moro sabía mucho de leyes, de religión, de las guerras, de literatura y fue ejecutado por Eduardo VIII por seguir fiel al papa y a la religión católica. Es un santo dentro de la comunidad católica. Escribió "Utopía", un libro que cuenta cómo se vive en una isla, en una república llamada así: utopía. Luego, el término ha sido usado más por las izquierdas que por las derechas para decir algo así como que la política sueña con un mundo mejor. Pero no. La política de hoy en día sueña con imponer sus idearios a la ciudadanía. La memoria histórica y la política de género es eso: una forma de meternos en la cabeza el rollo ese de que el sexo no es algo natural sino algo que nosotros pudiéramos elegir. Aunque esta chorrada solo se la creen los de Podemos y algunos recalcitrantes del Psoe, que hablan de sexo binario y otras gilipolleces por el estilo. Pero la verdad es que hacen mucho daño a los hombres por el hecho de inclinarse constantemente, aunque no tenga la razón en muchos casos, por la mujer. Es el feminismo rampante, es el rollo del sexo como batalla para dividir la sociedad. Y el otro rollo es ese de intentar ganar la guerra civil por medio de revisar la historia, ya que la perdieron esos nefastos rojos frente a Franco. Y por eso perdieron la Comunidad las hordas rojas, porque se empeñaron en que todo el mundo es fascista y no todo el mundo es fascista, sino que tiene el derecho de pensar como le dé la gana. Y así, la libertad ganó a la imposición de las izquierdas y seguirá ganando porque los fascistas verdaderos son el Psoe y Podemos. Y la utopía verdadera es ir por la calle tranquilamente sin que te llamen franquista o machista y poder expresar tu libertad del modo que quieras, teniendo en cuenta la libertad del otro, cosa que no hacen las izquierdas que lo quieren todo: su libertad de imponer y su libertad de guiar a la gente como si fuéramos ovejas. Pero eso es imposible porque los seres humanos, los ciudadanos, sabemos distinguir la verdad de la mentira, lo impuesto de lo que es propio de la razón, la corrección política de la libre expresión de nuestro cuerpo y mente.

 La vida del taxista es dura, como todas las vidas. Hay que madrugar mucho, al haber mucha competencia, para coger los mejores servicios. Y si después de estar una hora de reloj esperando un servicio, te toca eso que los taxistas llaman ñapa o chirifú, pues te fastidias: vas al ambulatorio por cinco euros y vuelves a la casilla de salida como en el parchís. El taxi es comparable al parchís porque depende de la suerte que tengas. Si sales de casilla para hacer una ñapa, mala suerte porque no avanza el contador (la hoja) y, para que un día te cunda, hay que hacer buena hoja de servicios, como la de los funcionarios. Hacer buena hoja supone hacer servicios de 20 o 30 euros para arriba. Si al taxista le tocan muchas ñapas en el día, se da a todos los demonios y maldice ese día porque la cartera no se llena de billetes, sino solo el monedero. Para esto del taxi es imprescindible tener unas rutinas y que esas rutinas le vayan bien al taxista. Por ejemplo, madrugar o trabajar siempre a las mismas horas y luego, dedicar tiempo a la familia. Hay taxistas que se ceban con la hoja y no ven ni a su mujer por ganar unos euros más. Eso también es malo. Dicen que los taxistas se vuelven peseteros o mezquinos, pero eso no se sabe con veracidad: puede haber taxistas generosos o que no den tanta importancia al dinero. También tienen fama de que dan vueltas en vez de ir en línea recta al destino, cuando el cliente es un chino que no tiene ni idea de cómo funciona el taxi, pero a lo mejor también es mentira. No sé. Ser taxista es complicado porque tienes que saber las calles, conducir bien y tener paciencia cuando la hoja no se llena.

 He leído un artículo sobre lo políticamente correcto. Y es que ahora, desde la izquierda, se nos impone qué debemos pensar, decir y opinar. Si vamos en contra del discurso de la izquierda, nos callarán llamándonos fascistas, machistas y xenófobos. Puede que haya un partido fascista en España, pero no se puede aplicar ese término a cualquiera que diga la verdad. Por eso, triunfó Ayuso, porque la gente eligió la libertad de decir lo que piensa sin que el nuevo comunismo le quitara la razón a base de insultos. Y por eso fracasó la izquierda en la Comunidad de Madrid, porque se puso a defender sus ideas de forma defensiva; o sea, que un montón de fascistas estaban agrediendo a los socialistas y a los comunistas. La votación demostró que esa tesis era mentira, como lo fue lo de las balas y ciertas cosas más. La gente ya estaba harta de comunismo asqueroso y votó al PP. Luego, los de la izquierda, como no tenían ya nada que decir, dijeron que había triunfado el PP de los berberechos, pero no. Ha triunfado el PP del derecho a decir la verdad sin que insulten desde la izquierda. Algo ganamos y es que ese incompetente de "coletas" se fue de la política asumiendo así que había sido derrotado por la derecha. Porque insultando al adversario no se gana nada. E imponiendo su verdad (la verdad socialcomunista) no llegarán muy lejos ni el PSOE ni Podemos pues la gente ya está harta de inventos de esa coalición asquerosa de lo políticamente correcto. Además, el presidente Sánchez ha demostrado varias veces ser un mentiroso y las mentiras, a la larga, se ponen en contra del que las articula.

lunes, 22 de noviembre de 2021

 Se despiertan todos. Unos van a la compra. Otros se quedan en casa y, por no salir, se comen a mediodía una lata. Unos fuman. Otros lo han dejado ya. Otros no tienen dinero para tabaco. Unos llevan al niño a la guardería y luego van al trabajo. Otros ni tienen niño ni tienen trabajo ni pareja sentimental ni perrito que les ladre. Unos andan atareados todo el día. Otros tienen horas por delante. Unos son una voz escuchada en la mañana. Otros tienen la voz callada todo el día. Unos se despiertan a las cinco o antes . Otros lo hacen a las 10 de la mañana. Unos hacen ejercicio, se van a andar hasta el campo de fútbol. Otros están toda la mañana sentados en una oficina o metidos en un taxi. Unos desayunan a toda prisa. Otros lo hacen con más calma. Unos escriben nada más levantarse lo que creen un monumento literario. Otros no leen siquiera una novela corta. Otros compran el periódico pero no entienden bien las noticias. Uno es el presidente del gobierno. Otro está en la oposición. Otros son ministros o ayusos que ganan elecciones. Uno es mi hermano. Otro soy yo.

jueves, 18 de noviembre de 2021

Tengo yo un sobrino nieto que no para quieto. Lo que pasa es que yo lo veo poco y no sé si será hiperactivo o no. Me dice Paco que el niño se concentra en la tele viendo animales. A lo mejor tenemos un Félix Rodríguez de la Fuente en mi familia andando el tiempo. Pero los niños cambian de gustos andando la edad. Sus padres me dijeron que por la mañana está más quieto y más concentrado con sus juguetes. La hija de mi primo Perico es muy, muy tranquila y cumplidora con los deberes de la escuela. Yo les decía a los chicos de la ESO: "Sois estudiantes, ¿no? Pues aprovechad el tiempo y estudiad para un futuro que no está tan lejano." Así deben hacer los niños hasta que llegan por lo menos a 4º de la ESO, curso que si lo aprueban, reciben ya un título que les abre ya algunas puertas al mercado laboral. Les hacía yo ver a los alumnos míos esas dos claves de su vida como participantes en la sociedad: que eran estudiantes y a eso debían dedicar la mayor parte de su tiempo y que el tiempo vuela. Si los niños llevan una vida ordenada en casa es muy fácil que vayan sacando los cursos. Yo estuve en barrios en que esa condición no se daba, había problemas familiares y se notaba en las redacciones y ejercicios que yo mandaba. Pero el buen estudiante se supera en las dificultades y saca los cursos y los títulos a pesar de todo. Más, si en su casa hay orden y buen pensar.
Me estoy leyendo otra vez "Fortunata y Jacinta", de Galdós. Es un drama que repasa la chulería de la burguesía madrileña al tratar a una "hija del pueblo" como es Fortunata. Los tenderos textiles en Madrid eran riquísimos. Vendían mantones de Manila y toda clase de género textil. Serían El Corte Inglés de aquella época. Jacinta, por su parte, se casa con un hijo de esos tenderos archimillonarios, pero no tiene hijos y los desea fervientemente. Al final, le quita el hijo a Fortunata después de muerta esta. ¿Tiene algún sentido político esta novela? No sé. Es como el abuso de las clases pudientes hacia las clases pobres. Estoy leyendo cuando el delfín (así se dice cuando un hijo va a heredar el poderío de un padre o un príncipe el trono del rey) se casa con Jacinta, que sufre mucho en la novela al igual que Fortunata. ¿Tiene esta novela un significado feminista? Puede tenerlo en el sentido de que esas dos mujeres son el juego del delfín, que en la novela se llama Juanito Santa Cruz. Galdós hace ver que la incultura y candidez boba de Fortunata la mete en mil peligros. ¿Es esta novela una defensa a favor de educar a las clases desfavorecidas? Yo creo que sí porque una persona con una educación media podría haberse salvado de la tiranía de Santa Cruz y Fortunata no sabe ni leer ni escribir. Lo deja Claro Galdós: educación para el pueblo llano.

 En el "Poema del Mio Cid" el autor de la obra dice, cuando el Cid tiene que dejar a Jimena a cargo de unos monjes de San Pedro de Cardeña: "se separaron como la uña de la carne". Luego, en Burgos dice el poeta: "burgueses e burguesas por la finiestra son / todos decían una razón/ Dios que buen vasallo si hubiese buen señor. Es muy fuerte esa metáfora pero el poeta acierta cuando hay una separación entre los enamorados. Se debían de querer mucho el cid y Jimena y así lo expresa el poeta con esa comparación tan cruda. Y la gente de la calle a veces se entera de quién es bueno o malo por las noticias que oyen y desean el bien a los dirigentes que saben hacer las cosas bien. Vasallos deberían ser todos los políticos estén al mando de un señor o no. Pero lo que hacen es llenarse los bolsillos y llenárselos a los amiguitos. La última cifra que oí de asesores de Sánchez es de cerca de 800. Los 23 ministerios de este gobierno significan también un despilfarro mientras la gente lo pasa mal. Podría ser el gobierno más austero con los tiempos que corren, pero no; los gobiernos de izquierdas, como el del inefable ZP, tiran la casa por la ventana cada vez que entran.

lunes, 15 de noviembre de 2021

Hoy Paco se ha despertado a las 11:00. Es un récord para él ya que se suele levantar a las 8 o, a veces, antes. Hay que agradecer a mi sobrino ese récord pues ha sido él el que ha llevado a su abuela a ver la geriatra a Puerta de Hierro. Ayer empecé "La madre" de Gorki. Es muy buena, está llena de tensiones y de deseos de "a ver lo que pasa". Me he encontrado a mi hermana cuando venía de la biblioteca de leer los periódicos. Me ha contado que mi madre no ha sabido decir a la geriatra cuántos hijos tiene, pero que ha sido muy certera con sumas y restas. Le han mandado a mi madre otra pastilla contra los nervios. Mi madre llora e insulta a la cuidadora. En fin, seguiremos a ver qué pasa. El sábado por la tarde, estuve yo muy mal en el "tú decides". Discutí con Paco porque quería un chuletón en vez de la mariscada. Yo ya le dije que lo que encargamos era una mariscada, pero la mala leche venía de antes, de lo que pasó con mi hermana y mi cuñado y lo de la mudanza. pero lo más importante de este lunes es que por fin, me siento a escribir mis historias que tenía abandonadas desde antes del verano. Voy a ver qué me sale.

domingo, 14 de noviembre de 2021

Me estoy leyendo "Utopía", de Tomás Moro. En ese libro, se habla de una isla llamada así. En ella, los habitantes solo gastaban un vestido de lana y otro de lino: invierno y verano, respectivamente. Y dice el libro que no eran más ni eran menos por vestir de este modo. No tintaban la lana y el lino era siempre blanco. Hoy en día, se da excesiva importancia a la imagen: el ir presentable o llamando la atención por medio del ropaje. Es otra esclavitud del ser humano en este mundo loco. ¡¡¡¡Cuántas páginas se han derrochado en contar cómo iba vestida la reina!!!!! En fin. Yo no es que vaya a la moda, es que voy muy simple de vestimenta. Pero no soy más ni soy menos por ir así. Ya decía Machado que le perdonaran "su pobre aliño indumentario". Hay gente que de ir bien vestido hace religión. Pero la realidad de la gente no es en cómo viste sino en sus acciones con los demás.

Dice un filósofo muy viejo que lo que hay que ser es buena persona allá donde vayas y punto. Yo me apunto a esto y prescindo de elegancia, presuntuosidad e imagen.

 Si pienso la vida de mis padres, me asombra el montón de circunstancias extrañas a las que debieron adaptarse. Desde que nacieron, todo fue cambio. Nacieron en el 30 más o menos. Pasaron la posguerra y luego, todo fue cambio en España. Más o menos nos pasa ahora a las generaciones posteriores a ellos: vamos a una digitalización y a una modernidad en la que yo, por lo menos, me siento muy chiquitito. Ayer mismo, al ver en el autobús cómo manejaban los jóvenes el móvil, me quedé asustado. Hacían greguerías con fotos, con historias y con otras aplicaciones que yo ya no entendía. Es la fuerza del paso del tiempo y con él, la llegada de otras modas y otras costumbres que nos hacen quedar atrás. A lo mejor, ser astronauta, en unos diez o quince años, es una profesión normal, si no lo es ya.

He pasado unos días agitado. Con insomnio. Con mal humor. Con penalidades mentales. A ver si hoy es el día en que desaparecen esos extrañas compañías de mi mente y duermo y siento mejor las cosas.


Hoy cumplimos Paco y yo 52 años. Celebraremos que estamos vivos de manera muy discreta. De pequeños fuimos a la Manga del Mar Menor y allí vimos por primera vez el mar. Nos han pasado cosas tremendas en estos tantos años. Pero hemos sobrevivido. Paco y yo intentamos haber sido docentes. Nos hemos tenido que retirar de nuestros trabajos. Llevamos una casa y yo he escrito unas cuantas novelas. Los que han estado cerca de nosotros nos han ayudado. Hace un mes, Paco me decía: "tengo 52 años y ni me he enterado". Es verdad que el tiempo pasa rápido, hagas muchas cosas o hagas pocas. Luego seguía diciendo Paco: "estamos de paso. Esto es un tránsito". El mundo es un tránsito, un caminito que hay que recorrer. 

Esperemos pasar este domingo con alegría, pasar bonitos momentos Paco y yo comiendo una mariscada y paseando por Las Rozas. ¿Somos aún jóvenes o ya vamos para viejos? Yo creo que la juventud se lleva dentro cuando uno tiene ganas de hacer cosas y pasarlo bien.

Paco y yo, después de todo lo que nos ha pasado, pretendemos ser discretos y no hacer grandes alharacas sobre nuestro cumplimiento de años. Solo pasarlo bien y reírnos un poco.

sábado, 13 de noviembre de 2021

 Ya tengo la lombarda cocida. He picado ajos y los he echado a la olla con aceite. Solo falta echar un poco de pimentón y a comer. Plato único. Si a la tarde hay hambre, se come uno un bollo o un sandwich. Yo soy un espíritu libre que tiene derecho a decir la verdad. Aunque sonría, no soy feliz. La vida es como ese hombre de la acera que pide perdón por pisar a un perro. Si pidiéramos perdón más a menudo, nos iría mejor. Hay que perdonar también las ofensas, las ofensas de esos que piensan solo en horizontal. La gente de hoy en día se refugia en El Corte Inglés como antes lo hacía en las tabernas y antes, en las catedrales. A cada tiempo, su creencia. Con estos bueyes tenemos que arar. La ropa mueve montañas de dinero, ya lo dice Galdós en "Fortunata y Jacinta" que es la historia del hijo de un tendero riquísimo. La pena del mundo circula como moneda trasnochada: no hay más que pobres pero lo peor son los pobres de espíritu. El hambre es un delito en el siglo XXI, pero la policía del mundo no lo ve así. 

viernes, 12 de noviembre de 2021

Yo no he leído "La Madre" de Gorki, pero sé que Gorki participó en el aquelarre comunista de la Unión Soviética, así que mandaría matar a algún que otro intelectual que no comulgara con el socialismo infecto que recorrió ese país matando zares y patriotas que se enfrentaron a ese monstruo del comunismo. En España se venció al comunismo y menos mal. La baja extracción social de los rojos en España hizo mucho para que no ganaran la guerra civil española. Franco no sería muy leído, no lo sé con certeza, pero sabía lo que quería: Madrid. Y Barcelona. Y Valencia. Y fueron cayendo una tras otra en batallas infernales como la de Teruel o Belchite. A mí no me gusta el comunismo y ojalá que en Cuba empiece la disidencia, como en China, como en Corea del Norte o en Bielorrusia. Esos regímenes son asquerosos, cínicos; solo viven bien los que aplauden a Fidel o a su hermano o al imbécil de Maduro. Bueno. Aquí, en España, tenemos esa calaña en el gobierno. Son los antisistema, los que quieren asaltar los cielos. Y luego son unos pijos señoritos de papá que no pagan a la asistenta, que cobran sueldos de universidades sin pisarlas, que cobran de estados crueles como Venezuela o Irán, que tienen más líos financieros chuscos: una pandilla de delincuentes.

 Bembibre es una ciudad del Alto León, en la zona del Bierzo y "El señor de Bembibre" es una novela histórica de amoríos y Templarios. Yo, si estuviera ahora mismo en Bembibre, me iba a la plaza del ayuntamiento, donde supongo que habrá bares y me tomaría un descafeinado. Después, visitaría las iglesias que quedan en pie y que los rojos de la revolución del 34 dejaron sin quemar, me prostraría ante la figura de Cristo o de la Virgen y estaría así en silencio frente a esas figuras que fueron humanas y divinas, media hora más o menos. Conozco una señora berciana muy maja y simpática que nos ha ayudado a los enfermos mentales de la asociación y conozco a Fernando Yubero, que también es de la zona de Ponferrada. Yo en Ponferrada no he estado nunca, pero puede que algún día esté.

Ahora, me voy a acordar de mi primo Perico, cuya calmosa prosopopeya le salvará de sus padecimientos y me acuerdo de mi sobrino nieto, al que le gustan los osos, los leones y las cebras. Me parece que la mujer de mi sobrino el mayor está opositando. Ojalá consiga plaza y se asegure un sueldo. Me acuerdo de mis padres, que, según ellos, tienen la carrera hecha y los deseo larga y buena vida. Y me acuerdo de Paco, mi hermano gemelo, que es mi asistencia en todo tipo de turbulencias nerviosas de mi mente.

jueves, 11 de noviembre de 2021

Paco y yo hemos ido a Las Rozas y hemos vuelto andando. Recuerdo los días de verano en que Paco estaba muy gordo y enseguida se ponía a sudar y se cansaba cuando andaba unos pocos pasos. Paco ha recuperado la fuerza y ya puede hacer ejercicio. Paco ahora también se muestra muy reacio a conducir porque dice que le cansa mucho. Tendremos, en un futuro próximo, que recurrir al transporte público si queremos trasladarnos. Nuestra enfermedad quizás lleve otras enlazadas como el hígado graso de Paco y el cansancio. No en vano tomamos pastillas a diario que deben ser malas para el hígado, riñón, etc.

Bueno. Espero que estos dos meses que quedan para acabar el año sean buenos para todos y nos lo pasemos bien y no nos pongamos nerviosos y los vivamos felices y con esperanza de mejorar en todos los ámbitos de nuestra vida. 

Estos días de atrás he estado muy nervioso. Estaba yo en Colón con mis amigos y vino Paco y me contó que mi madre había insultado a la cuidadora. Yo ya veía un horizonte malo en mi casa y me preocupé. Luego, me salió un bulto en la cara interior de la mejilla y me puse de los nervios porque creía que sería un cáncer o algo así. Me puse aún más nervioso y así, dirigí mis envenenados dardos contra mis sobrinos, que, pobrecitos, no tienen culpa de nada. Ya he borrado y/o eliminado los blogs en los que yo insultaba a mis sobrinos. Precisamente, fui a la farmacia a por mis medicamentos y me atendió la más joven, que es la más lista, y me dijo que no me preocupara de los bultos en la boca y me dio una muestra con un gel y me lo di por la noche y se me quitó el bulto. Ya me sentía mucho mejor. Hoy por la mañana y por la tarde hemos estado Paco y yo en casa de mis padres y mi madre estaba tranquila, menos mal y eso me ha dado ánimos y espero que Sara, la marroquí que ahora está en mi casa, dure más que las otras, porque es muy buena persona. 

He estado metiendo temas de oposición en una carpeta gigante. Recuerdo que en un examen de oposición me tocó la poesía del siglo XX española. No lo hice tan mal porque saqué un 5. En la exposición del tema me tocó la semántica y saqué otro 5. Eso dio para que me llamaran de profesor y así mi vida pegó un cambiazo grande. Al lazarillo le tocó servir a un ciego que le dijo ante una cabeza de toro de piedra que hay adornando el puente sobre el Tormes en Salamanca: "pega la oreja a la cabeza del toro y oirás gran ruido en ella." Cuando Lázaro hizo esto, el ciego le dio una calabazada de la cabeza de Lázaro contra la del toro. Pero todo se resolvió al cabo de un tiempo cuando los dos pasaban por una ciudad y llovía. Lázaro dijo al ciego: "aquí hay un gran riachuelo: dé un gran salto y no se mojará". En realidad, Lázaro puso al ciego enfrente de una pared y el golpe que se dio en la cabeza probablemente le mató al ciego. La venganza es triste, pero es venganza que se aprende después de muchas putadas. No nos dice el autor si el ciego murió, pero sí que Lázaro le dio por muerto. Tristes días aquellos en que las cosas se resolvían así de cruelmente. En la vida de hoy en día, también hay venganzas y tristezas, pero muchas otras cosas se resuelven hablando.

 "Gira el mundo gira" dice una canción. Claro que gira. Me dijo un día Venancio que el tiempo no se distrae con nadie, como hacemos los seres humanos, que nos distraemos a charlar mientras vamos con un objetivo por la calle. Por ejemplo, vamos al ayuntamiento y nos cruzamos en el camino con un amigo y ya nos ponemos a charlar y tal. Eso no lo hace el tiempo. El tiempo sigue y sigue. Venancio ha muerto. Le dio un jamacuco en su casa y murió. Venancio daba vueltas por las calles del pueblo, entraba en los bares y no solía hablar mucho. La gente que habla mucho, mucho se equivoca. El sol sale para todos pero los humanos nos encargamos de hacer la puñeta a nuestros semejantes aunque el sol salga para todos. Es así. Dice una conversación entre dos: "dicen que se iban a repartir las riquezas". Contesta el otro: "yo me conformaba con que se repartiera el hambre". Las riquezas son un punto muy conflictivo en la vida del hombre; el hambre, no tanto porque cada ser humano tiene su hambre y no la puede evitar. Todos tenemos hambre, no todos tenemos riquezas de índole material. Sería más justo que se nos saciara el hambre en vez de la sed de riquezas.

 No me centro en mis escritos y en casi nada de la casa porque lo de mis padres me pone nervioso. Que oiga yo cosas de que mi madre se ha puesto a insultar y dar voces me pone mal. Estar un fin de semana con ellos la aguanto, pero me distrae de lo que yo solía hacer, que era escribir y leer. Me estoy leyendo "Utopía" de Tomás Moro, hombre que fue ejecutado por Enrique VIII. He empezado a leerlo y me doy cuenta de que en aquellas épocas, la gente vivía para y por las guerras innumerables que había en los países. A los ladrones simplemente se les colgaba en la plaza pública de veinte en veinte. Los enfermos y los viejos no tenían amparo alguno. En fin, nos quejamos de que vivimos mal, pero si miramos 300 años atrás nos deberíamos dar con un canto en los dientes. Mi primo Perico es un hombre al que la calma le recorre el cuerpo como un traje del Corte Inglés, con mucha elegancia. Esa calma inusual  en las gentes le vendrá como anillo al dedo para superar su enfermedad. Mi sobrino Carlos estará viendo los avances que hace su hijo y se sorprenderá aún más cuando el niño se ponga a hablar y diga cosas inimaginables para un adulto. La vida nos trae sorpresas como una curación, como un niño que empieza a hablar o un aparato que lanzan a Urano.

 Ya son las doce en el reloj, hora que un poeta vallisoletano convirtió en el eje de su poesía porque para él era el signo de que "el mundo estaba bien hecho". Ya he dicho en el blog anterior que, al despertarme, no está mi cabeza para muchos vuelos narrativos o poéticos, pero ya he ido a ver a mi madre, ya he ido por el periódico y he comprado media piña. Hoy hay para comer caracolitos de pasta con salsa de Nápoles. La vida es un escurridizo animal que se nos pega por la piel y nos hace escocernos a veces. La vida es incomprensible para un mortal pues la vida la creó Dios hace mucho tiempo y su devenir solo la sabe Él, que está en las alturas. Decimos en el Padre Nuestro: "que estás en los cielos". ¿Por qué será que la "morada sin pesar" que dijo Jorge Manrique coincide con el cielo que nos cubre la cabeza? Pitágoras y otros dicen que en las alturas hay una música que no oímos, pero que está sonando. También lo dijo Fray Luis de León. La música de las estrellas sería la armonía que reina en el cielo, cuando vayamos a él. Ojalá el cielo sea el aposento de todos aquellos que han sufrido en la Tierra. Un amigo mío, Manolo, decía así: "pobre del pobre que al cielo no va: le joden aquí, le joden allá." Por eso, ojalá vayamos al cielo a ver por lo menos en qué consiste.

Ahora por la mañana, la cabeza no está alegre de palabras como para escribir, pero lo voy a intentar. La vida pasa para todos, pero no igual para todos, los hay que viven mejor y otros con la lengua afuera. Después de todo, el ser humano sabe aprovechar lo bueno hasta en las malas ocasiones y hay quien se muere de un éxito y otro que no se recupera de ese mismo éxito y va dando tumbos como una  estrellita de televisión. Hoy me ha dicho el horóscopo que me dedique a la artesanía y me busque un buen socio para venderla.

Bueno. Pues yo sigo a lo mío, a ocuparme de mi persona sin que otras personas me envenenen el alma. Dejaré de penar y de pensar en cosas que no me convienen. Después de todo, el hombre y la mujer las creó Dios para que estuvieran juntos y así debe ser para lo bueno y para lo malo. Ya dije que este no es buen momento para escribir y así ha quedado demostrado. No me ha salido un buen texto. A ver si esta tarde lo mejoro.

miércoles, 10 de noviembre de 2021

Me he dado cuenta de que estamos todos de los nervios. Unos más, unos menos, los problemas que hay en el mundo nos han afectado a la cabeza. La angustia nos entrelaza entre sus brazos como una novia; el suplicio de vivir nos arruina el ánimo. Pero hay que seguir luchando. No queda otra. Tenemos que vivir aunque sea mordiéndonos las uñas y los labios y seguir y seguir. Dios nos ha puesto en el mundo no para que reneguemos de él sino para que le encontremos un sentido aunque sea en el sufrimiento. Ya decía un filósofo francés que el sufrimiento aviva el ingenio de manera que encontramos la salida del gris laberinto con la imaginación más agudizada. Los males que nos trae la llamada civilización (que no deja de ser una merienda de negros, un negociete), hace que desarrollemos un instinto de supervivencia que haga que salgamos adelante. Esto vale para los enfermos, para los cuidadores de esos enfermos, para los que económicamente se vuelven locos para hacer las cuentas, los que tienen hijos que les roban la vida, etc. Hay que vivir; por eso estamos en la vida. Hay que luchar porque la vida es lucha. Y hay que dejar, en estas tardes tan desastradas, un resquicio al chiste y a la sonrisa.

martes, 9 de noviembre de 2021

 A veces uno no sabe bien a ciencia cierta si se encuentra bien o mal. Ha ocurrido con la pandemia que la gente ha salido mal parada, y no me refiero sólo a los síntomas físicos del virus. Resulta que se habla de viva voz de los problemas psíquicos que el covid19 nos ha dejado como de refilón, no sólo a los enfermos, sino a familiares que han perdido a seres queridos; adolescentes que llevan mal todo el rollo de confinamientos y que están más expuestos psicológicamente porque empiezan a pensar como adultos en un ambiente pesimista como es el que crea la pandemia ; personas ancianas que sufren mucho, pero que casi no nos importa, etc. etc. etc.

Y como de refilón se toca el tema en los medios de los problemas mentales después de la pandemia y bla, bla, bla. Los hechos, las ayudas al que sufre depresión, ansiedad, fobia y tantos problemas psicológicos que surgen a raíz del ir y venir de contagios se disuelven como azucarillo en el agua. Y yo expreso : CONTRATEN MAS PSICOLOGOS Y MAS PSIQUIATRAS. OPOSICIONES YA PARA CONTAR CON UN BUEN PLANTEL DE PROFESIONALES EN NUESTRO PAIS. Pero entre que está mal visto mostrar "debilidad psicológica" por el qué dirán y menos expresarla; y los pocos medios de ayuda que tenemos nos tendremos que contentar con cantar para nosotros la canción de la pandemia sobre la supervivencia, del "Dúo Dinámico"

Aportación de F. Moreno


 Debería estar lloviendo pero luce el sol. El chatarrero anuncia que se lleva todos los trastos viejos. Al afilador se le oye silbar con su armónica vientos de muy lejos. La carretera de La Coruña está llena de coches. Pasamos el veranillo de Todos los Santos como Dios nos da a entender. Ya hay nieve en Guadarrama. ¿No ves, Leonor, aquella mancha blanca en los lomos de los montes? La verdad os hará libres, dijo Cristo. Me gustaría que mi primo Pedro se curara pronto, que después de la lucha contra su enfermedad, volviera a disfrutar sin temor de la vida. Ahora, le hacen falta paciencia y optimismo pero una persona como Perico rebosa de ambas porque es un tipo templado y tranquilo. La vida va llevando fortunas o desdichas por cada barrio y cada persona en particular. La pena nos acompaña siempre, aunque, a veces la disimulemos un poco más. La manera de hacer las cosas define a las personas y los sentimientos también la definen. Hay que volver a lo de antes, lo de nuestras personas mayores, que todo lo hacían con paciencia y con amor.

domingo, 7 de noviembre de 2021

 Debería estar lloviendo pero luce el sol. Un sol con minúsculas pero que irradia calorcillo de otoño rancio. Los viejos son difíciles de contentar, que me digan a mí este verano. Menudo rollo con las comidas y con manías que se les meten en la cabeza a mis padres viejos. Había que estar a sus órdenes continuamente. Mi cuñado Antonio no fue ni a saludarnos cuando llegamos al pueblo, el día 12 de julio. Mi hermano Paco lo pasó mal por un mal rollo psicótico que le entró y porque se obsesionó con los ruidos de la casa rural, pared con pared con nuestra habitación. No pudimos charlar con nadie del bar y aguantar las necedades del dueño del bar, que está un poco tonto: "¿estás seguro que quieres un helao?" Bueno. Y la gilipollez de los corros que se formaban en la terrazas que no nos hacían ni puto caso ni a mi hermano ni a mí, así que hemos decidido que si vamos al pueblo de visita un día, no vamos a entrar en ningún bar. El que quiera vernos que suba a la plaza. Ya veremos si el año que viene vamos al pueblo pero me da a mí en la nariz que ni hablar del peluquín. Yo ya lo he pasado bastante mal este verano.

viernes, 5 de noviembre de 2021

 Me parece que hoy debería estar lloviendo. He estado leyendo a Galdós. Escribe muy bien ese tío. No sé cómo pasar la mañana y me angustio un poco. Me tumbo en la cama y medito o pienso en cosas de la semana, ya que hoy es viernes. Analizo los pocos acontecimientos de los días de atrás. Las vecinas se ríen, no sé de qué. Dos mujeres que hablan parece que invocan a la risa. Ojalá mi primo Perico haya levantado el ánimo. La vida es como una escuela muy grande donde cabemos todos y no paramos de aprender. No hay maestros en ella y si los hay, no tienen título, pero ejercen muy bien su magisterio.

Me parece que hoy debería estar lloviendo. Sin embargo, luce un sol muy luminoso, como suele ser él, el dios de los egipcios. Ya digo que Galdós escribe muy bien, eso se ve a la legua, solo hay que leer alguna de sus novelas aunque sea de refilón o a vuela pluma. Espero que Perico se muestre más optimista ante su situación. No es fácil, pero se puede. Espero que en el pueblo reine la misma armonía que reinaba cuando yo era joven y andaba por sus cortas calles de pueblo, sus felices calles de pueblo. Hay gente que no cuenta lo que hace ni lo que le pasa y crea desconfianza. Ellos sabrán. Hay gente que solo te quiere por el dinero que tienes, ellos sabrán. Y hay gente que te quiere de verdad, ellos sabrán, pero son muy pocos, de esos hay muy pocos, es ley de vida. La gente va a su interés y necesita mucho dinero para vivir bien. Son esa gente con poco seso en su cabeza y con numerosos deseos. Hoy debería estar lloviendo pero no cae ni una gota del cielo. Ojalá el pueblo conserve esa felicidad en las calles que yo tanto gustaba de joven.

jueves, 4 de noviembre de 2021

 Hay gente que lo va ocultando todo: sus amistades, los acontecimientos que sufre o disfruta, las cosas que hace... En fin, lo va escondiendo todo. Con el tiempo, esa gente se convierte en una especie de fantasmas de las que no sabes apenas nada porque no ha hablado claro nunca y sigue ocultando cosas todavía. Cuando se hacen mayores, se convierten en unas personas muy serias y aburridas que han corrido todo tipo de aventuras pero que no han contado ninguna, que no han compartido contigo su vida ni los sucesos de la misma. Son gente muy antipática, seria, imperiosa, que se cree más que los demás. Cuando se dan cuenta, ya es tarde para que los demás les cojan confianza o sean sus amigos pues han ocultado tanto que no sabemos muy bien quién son esa gente tan callada y seria y antipática. Se lo han pasado muy bien, pero tú no lo sabes ni lo sabrás nunca, pero han creado una desconfianza entre la gente que conocen (familiares, otros amigos...) que ya la gente los mira con cuidado y con temor, no vaya a ser que te la armen precisamente porque no conoces nada de ellos.

miércoles, 3 de noviembre de 2021

 He llamado a mi prima del pueblo. Su voz, más sosegada que las últimas llamadas, me ha tranquilizado mucho. Mi primo va a luchar con uñas y dientes porque tiene una gran fortaleza y una gran personalidad. Ayer por la noche llovió como una media hora larga (un récord para lo que suele llover por aquí). Hoy ha amanecido frío y despejado. Ya no sé qué dirán de Sánchez ni de Casado ni de la nueva dirigente de Podemos, esa Yolanda Díaz que dice que el comunismo es libertad. Me importa poco lo que digan o hagan los políticos. Pero siempre no me gustará el socialismo en España por su pasado oscuro. Y menos me gusta Podemos porque tiene en sus filas una serie de delincuentes de aúpa. Ayer estuve a la presentación de un libro, un libro que se titula "Tú decides" en el que yo y otros 17 enfermos mentales hemos participado. Ha estado bien. He visitado la biblioteca más grande que he visto en mi vida: la de "León Tolstoi" en Las Rozas. Me encantaría pasar allí una tarde leyendo los periódicos, viendo las novedades. Es una biblioteca para perderse. Lástima que tenga una mala comunicación.

lunes, 1 de noviembre de 2021

 Los meteorólogos y meteorólogas se han vuelto a equivocar. Anunciaron lluvias todo el fin de semana. Llovió más el viernes por la tarde que en todo el fin de semana. Y decían que llovería hasta el lunes inclusive. Hoy, sin embargo, está haciendo un buen día, con sol y buen tiempo, no excesivo frío. Paco y yo nos turnamos para estar con padres: Paco ha estado de 2 a 4 de la tarde y yo de 4 a 6. He estado leyendo la prensa. He leído un buen comentario del partido del Real Madrid y la noticia de un boxeador de los años 50, cubano, que ganó torneos a sus contrincantes y, sobre todo, al hambre. Sigo acordándome de Perico y no es la primera vez que recuerdo leer que con un buen ánimo y optimismo, se vence a esa enfermedad. Lo importante es tener paciencia, mucha paciencia y buen humor para sobrellevar el tratamiento. Ya se acaba el fin de semana largo de esta semana y luego viene la Almudena el día 9 de noviembre, que cae en martes, pero solo es para los madrileños. Luego viene el megapuente de la Constitución. Luego dicen que hay pocas fiestas.

Lo he pasado mal pero hoy es el último día. El jueves fuimos a  ver al nuevo psiquiatra. La vida de Paco y mía no reviste mucho interés. Hace tiempo que no vamos de vacaciones ni de fiesta. Vaya verano que hemos pasado en el pueblo. Vaya días aquí, aburriéndonos. Pero bueno, peor es estar delirando o alucinando con nuestra enfermedad. Hoy es lunes día de Todos los Santos y hoy ya se acaba todo. Yo he pasado ansiedad y angustia los días de antes. Estar metido en una casa todo el día cansa. Menos mal que Paco y yo nos podemos turnar. Dice mi horóscopo que improvise una salida. ¿Dónde y cuándo puedo yo improvisar una salida? Siento lo de Perico, también lo paso mal pensándolo. Yo creo que si Perico hace de tripas corazón y se anima y es optimista a pesar de los pesares, se podrá curar con paciencia y ganas de salir del mal rollo ese. Viene otro puentazo del 6 al 8 de diciembre; o sea, viernes, sábado, domingo, lunes, martes, miércoles (día 8 de la Inmaculada) pero no sé si la gente tendrá dinero para gastar. Ha salido este finde que anunciaban lluvia. Ese puente de diciembre va a ser clave para las economías. A ver qué economía resiste tanto puente y tan largo. Padre quiere despedir a la cuidadora. Otra mejor no va a venir. Otro rollo que a ver cómo se resuelve.