El agua del cielo está causando muchos disgustos, pero yo creo que con esta lluvia que ha venido tendremos un verano no caluroso. El verano cogerá la memoria de este marzo fresquito y nos respetará con temperaturas agradables. Julio y agosto sorberán con el calor la empapada tierra y la devolverá en tiernos calores admisibles. Vendrán días de dicha para el campo que producirá más de lo de años anteriores. Los pantanos vacíos se han llenado. Los sustos que da el agua se complementan con sus beneficios. El agua es vida aunque también lleve la muerte. El agua se extiende, el agua desborda, el agua no para mientes pero el agua por fin ha caído más que cuarto de hora. El agua ha sido generosa y traidora, pero ha sido por fin un agua duradera.
El agua y el fuego en demasía son temerosos.
Dios nos libre de ellos en nuestra pobre vida.
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