domingo, 13 de abril de 2025

 Había una mujer jovencita a la que le cayó una bomba cerca, pero no la mató. Esta mujer, más tarde, se casó con Doroteo, pero este hombre no la mató. Tuvo que comer mondas de patata, mondas y restos de lo que a otros quedaba, pero eso no la mató. Tuvo cinco hijos pero esos cinco hijos no la mataron. Incluso alguno de ellos le dio una ilusión para vivir pues caminó por el camino recto de la vida. Se puso mala del corazón, pero su corazón mismo no la mató. Su corazón siguió palpitando con un poco de anormalidad pero no la mató. Y un día quizás Dios la mató; fuera Dios o el diablo, ella no lo supo, la mataron. Y su recuerdo no duró mucho. Su recuerdo también murió. Lo que pervivió fue su alma que ahora está junto a Dios ya que Dios dijo: los últimos serán los primeros. Y su alma se regocija en el seno de Dios, aunque esta señora jamás pisó una iglesia.

Para los que vinieron al mundo a pasarlo mal, 

¿no habrá una recompensa?


No hay comentarios:

Publicar un comentario