La televisión rusa asusta a Occidente: "bastan tres misiles para destruir la civilización". Pues vaya amenaza. De gente cruel y, a la vez, necia. Y además, yo creo que basta con un solo misil atómico para que todo empiece y acabe en destrucción mundial, pues Occidente no esperaría a que tirara Rusia el segundo misil. Una mierda todo esto de la amenaza nuclear. Se supone que en 1991, cuando se disolvió la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, acabó la Guerra Fría, el Telón de Acero. Pero ahora hay un ultraderechista en el poder ruso, un tirano que se ha cargado a todos sus opositores. Y tiranos como Putin no los quiere nadie. Bueno, los quiere la población rusa que está muy acostumbrada a dictadores como este que proviene de la KGB. Rusia, como siempre, imperialista y tal.
Mira cómo come toda la burocracia del Kremlin.
Como comían antes, cuando eran rojos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario