Los apresuramientos son malos, nos crean estrés. Mejor, tomar las cosas con calma y si alguien nos mete prisa, como dicen los ingleses, al diablo con él. Muy pocas cosas merecen la pena en esta vida. El amor fraternal sí merece la pena ser cultivado. Es un amor que surge desde el útero de nuestras madres, pues de la misma bolsa nacemos los hermanos. Si yo me encontrara con un amor sentimental, con mi pareja, tengo que hacer un esfuerzo para mantener un cariño lánguido con ella. Con mi hermano es diferente: es sentimiento y sangre y bolsa amniótica y dolor de vivir lo que comparto con él.
No hay comentarios:
Publicar un comentario