Por las mañanas he cogido un hábito escritor y un hormiguillo me recorre de modo que escribo aquí algunos pensamientos o sentimientos que luego lee la gente. Me valgo, cuando no estoy inspirado, de unas colecciones de poesía para escribir estos trocitos de reflexión. Suerte tiene aquel que no teme al futuro porque así no teme dos veces. Pero el futuro está ahí, aguardándonos, como si un cobrador de entradas se tratara para dejarnos asistir al espectáculo próximo o quizás la desgracia próxima, no lo quiera Dios. La vida va pasando, simplemente, va pasando la mayor parte de las veces. Acuden relucientes la pluma y la escama pues marinero poeta soy de la gaviota y de los peces. La mar está tranquila hoy pero no sé como estará mañana. La dicha no es para todos, siempre hay un dolor que esperar de los días que llegan al puerto.
Irán amontonándose las flores como ofrenda feliz de frondoso cuerpo
para que todos vean la veracidad de mi ilusión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario