viernes, 18 de octubre de 2024

Un periódico. Leerlo, pensarlo y ver cómo va la vida de estos que somos seres humanos metidos en un calcetín. Y la vanagloria y el éxito de algunos que casi se salen del calcetín. Pero no nos equivoquemos: vivir es vanidad de vanidades. Nada queda, todo pasa. Aunque algunos parecen endiosarse y afamarse con estatuas, libros y otras obras de arte, todos pasan y todos son olvidados por las generaciones que vienen. Esos chicos que hablan dos idiomas por lo menos (inmersión lingüística en inglés), que van a todas partes en una furgoneta, que son erasmus, que son viajeros por naturaleza; esos olvidarán a viejas antiguallas como Almodóvar, como Pérez Reverte si no los han olvidado ya o no se han dado ni cuenta de su existencia. Y ellos, erre que erre, a hacer películas y libros. ¿Para qué queremos tantas películas y tantos libros? Prefiero uvas pasas a Vivaldi que me dan más calorías.

Una palabra pronunciada durante el sueño

se hace realidad frente a un café oscuro como el infierno.

No hay comentarios:

Publicar un comentario