El que se alía con la mentira, no cuenta más que cuentos. Irene Montero dice que estamos en un régimen feudal. Aluden a la tristeza absurda de un bocadillo sin nada dentro para pedirnos su voto. Los bancos, donde cada hijo de vecino tiene sus ahorros, son demonizados por esta gente como si fueran el diablo. No quieren parecerse a ministros del PP pero se compran chalés igual que ellos. No hacen más que ver dramas humanos que solucionarán eliminando la constitución, quitando al rey y poniéndose a dirigir un telediario para comernos el coco. Otro mentiroso compulsivo es Pedro Sánchez, jefe de esa cueva de Alí Babá que no ha hecho más que robar al español desde tiempos de Felipe González. Para olvidar el robo al ciudadano y el derroche de ZP pues la Sexta y otras cadenas de izquierdas se han tirado días y días sacando por la tele a Rato. Aquel de la UGT o del PSOE que se gastó el dinero de los parados en putas y en cocaína ha salido escasos segundos en televisión. Ni siquiera en televisión. En un recorte de prensa. Y es que la izquierda tiene permiso para todo pues ya sabemos que la izquierda apoya al parado creando paro; apoya a las mujeres organizando manifestaciones; la izquierda está llena de giliprogres que te dicen lo que tienes que hacer sin ni siquiera pensar. Por eso se los llama los socialistos, porque saben de sobra lo que necesitas: que te suban la pensión y te den una ayudita de 200 euros y luego te cosan a impuestos para quitártelo por otro lado. Y luego, te mandan al paro y no terminan la legislatura porque ya están hartos de gastar dinero y de hacer el ridículo: Total, que se cagan, dejan la mierda en el escenario y se van por las bambalinas y dicen: yo no he sido. Y eso sí: luego se permiten criticar y atosigar al gobierno siguiente para alcanzar el poder. Lo que no entiendo es cómo el PSOE no tiene solo 4 escaños en el Parlamento. Será por la colección de paniaguados, por no decir ilusos bobos que hay en España.