Ya son las 7 30 de la mañana. Como no había leche, me he ido a un bar a desayunar. La política de este bar es muy inteligente. Como está al lado de dos paradas de autobús, abre muy pronto para los madrugadores. Luego, por la tarde cierra y también los domingos, que en Majadahonda no hay nada. Cuatro o cinco camareras sudamericanas lo atienden muy bien y los productos son buenos. Ya se sabe, al que madruga, Dios le apoya. Y desde las 6 o 6 y media que abre, el bar está lleno dando desayunos hasta mediodía o más. Te ponen el café y la barrita con aceite casi en el acto y son muy amables. Yo voy allí cada vez que una pesadilla me despierta a las 4 o 5 de la madrugada. Oigo la radio hasta que el bar este abre y luego me voy a Las Rozas. Hoy he hecho pereza y no he ido a pasear. Quería empezar la novela que tengo en la cabeza pero me da que yo, a estas horas, con el efecto secundario de todas las pastillas que tomo antes de dormir no estoy para la ficción ni para inventar nada. Lo dejaré para esta tarde, supongo. Se va a desgranar la mañana como los trigos en las eras. Se va a romper otra vez España en partidillos de mierda. Ya no creo en la política. Estuve muy preocupado o interesado por la historia de España y su política pero ahora ya no. Que den por culo a la política. No sé si interesarme por el medio ambiente, que lo veo mucho más interesante e importante que toda esta bazofia de politiquillos tontos. Pero no sé por dónde empezar. He mirado cosas en la Wikipedia sobre el tema pero no me engancha.

Mañana ya voy a la psiquiatra y compro los medicamentos. Parece así que mañana se cierra un círculo y puedo pensar mejor. No es que cuente cosas muy importantes a la psiquiatra, que la pobre, en media hora, no va a resolver gran cosa, pero sí que me desahogo un poco. El verano empezó con un sainete montado por mi hermana y mi cuñado cuando vinimos de Soria y ha sido un aburrimiento mortal en el pueblo. A ver si va surgiendo otra cosilla por ahí.

Deseo ir al mar a bañarme pero con estas aguas y este frío, tendré que ir a Hawái a bañarme.

Si madrugas, ves el sol cómo nace.