miércoles, 25 de septiembre de 2019

Los trabajadores siempre están luchando. Trabajan muchas horas y no ven a su mujer ni pueden ver la serie de moda. Las mujeres siempre están luchando. Trabajan y trabajan horas interminables y no tienen tiempo de dar a su hijito un yogur. Ni siquiera un beso. Los homosexuales siempre están luchando. Los pegan y los insultan por la calle y si trabajan, todo el mundo les señala con el dedo y les dice por lo bajini: "ese es marica" y cosas peores. De modo que el mundo debe ir hacia una situación en que todos seamos homosexuales o mujeres sin hombres. Las mujeres se embarazarán con esperma que habrá guardado en una inmensa nevera y así no sufrirán a los hombres. Los hombres estarán en reservas para que se masturben (les proporcionaremos fotografías porno muy llamativas). El mundo será solo para los homosexuales y las mujeres pues estos seres son seres puros que responden al pensamiento moderno. La modernidad pasa por prescindir de los hombres heterosexuales porque estos tienen un miembro sexual muy peligroso. Una jeringa, dentro de unas décadas preñará a las mujeres y con la eugenesia prevista para este mundo futuro, todas las que nazcan serán niñas. Cuando se agote el esperma de la nevera, dejará de haber humanidad y así el planeta Tierra evolucionará él solito hacia una condición medioambiental óptima. Ya no habrá explotación del hombre por el hombre, ya no habrá más revoluciones pendientes. Los maricas y bolleras pasarán el rato dándose amor y las mujeres serán libres por fin de hacer lo que quieran sin temor al hombre, a los que se exterminará después de haber estado unas pocas décadas en reservas. Y esto no lo hará la izquierda, sino todo el mundo (obreros, putas, ejecutivos, arzobispos, etc. ) al unísono y de acuerdo con las ideas más modernas que existen hoy en día. Está pensado que para 2100, ya no haya nadie en la Tierra del género humano. Qué bien. Podéis aplaudir. Vivan las mujeres. Vivan los homosexuales. Vivan los animales. Viva yo.

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