Salió a la calle un hombre con sombrero y pasar, lo que se dice pasar, no pasó nada. El último de la fila es el que ayuda a los demás, así ha pasado siempre, pero ni nos hemos dado cuenta. Hace ya mucho tiempo que me pica la espalda, quizás debería ver a un médico. Es dulce ver la mañana pasar sin tener que pringarse en ella, pero no por ello dejo de mojarme en el cielo frío y claro de después de la noche. Por la carretera han pasado ya los enemigos de los viejos, cantando su gloria a la vida y a la felicidad. No consiguen reunir un poco de dinero entre sus manos, todo se lo gastan. Pero así conviene al que vive la vida y al que solo la ve pasar. Andando se ven muchas cosas: a la abuela con la nieta y a los amigos de lo ajeno correr.
Bailaba sobre las anchas baldosas de la alcoba
para que la luz de la vida llegara a su casa tiernamente.
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