Pongámonos en la ventura de lo difícil que es vivir. Saldrán obstáculos múltiples, que hay que sortear. No nos durmamos y luchemos contra nosotros mismos, que es la peor pelea que podamos librar. No hay mariposas ni corazoncitos por ningún lado. La mañana te aterra y hay que llenarla de horas de trabajo, de cariño por los tuyos, de mucha voluntad. La mañana es inmensa, parece que no tiene fin. Hay que leer el periódico, oír la radio para estar en el mundo informado. Hay hermanos que no se hablan, padres e hijos enfrentados. Bueno. Sigamos en la vida. Todo tiene solución. La mañana va haciendo una bola grande de incomprensión y magaña pero debemos seguir. Quizás algún día veamos la luz detrás del misterio que son las pasiones y los enfrentamientos. Todo tiene solución. Hay que leer el periódico, oír la radio, intentar comprender al otro, vivir sin discordia. Es navidad. Hay que hacer paces como panes, hay que hablar y no huir. Hay que pedir a los reyes magos que nos traigan la paz. Sé feliz en navidad.

Las patas encendidas de los caballos que huyen

algún día retraerán su marcha y volverán con una niña en su montura.