He estado todo el mes de junio oyendo la cadena Ser. En la cadena Ser se habla casi siempre de política, si no siempre. Que si Vox, que si el LGTBI, que si la Guardiola, que si Feijoo, que si Sánchez, las elecciones... También he oído en esa cadena una entrevista a Fito Páez y otra a una escritora del montón que también era ella muy política. En la cadena Ser, te politizas de modo que cualquier tema es susceptible de presentarse como un tema político. Este mes de julio voy a escuchar la Cope, a ver qué tal. En la Ser te machacan los oídos con la app, con las notificaciones, con los podcasts. Todo va en podcasts. Podcasts por allí y podcasts por allá. El tema del orgullo gay y el tema de la Guardiola ocupaba mañanas y tardes enteras. Ya era un poco rollo todo eso. Ayer ya oí la Cope y hay un programa en el que hablan los oyentes de temas como la vestimenta, los tatuajes, las citas de novios, etc. Voy a contar una anécdota que se contó que me pareció graciosa: resulta que unos padres tienen a su hija apuntada a judo y a violonchelo. La madre se va a trabajar y  le da unas indicaciones al padre: que la vista a la niña con el traje para la audición de violonchelo. El padre no se entera y la viste a la niña de judoca, va al judo y no hay judo. Tuvo que ir a la audición vestida de judoca. Y luego hablaron del golpe de calor: el primer síntoma es dolor de cabeza; luego fatiga y lo peor, vómitos y mareos. El lema de Cope es: Cope, estar informado. Me gusta.

Si todo es política en este mundo,

¿por qué no ha resuelto la vida de los humanos ya?