Esta noche de este mundo ha sorprendido a más de uno con colores estrambóticos. Han bailado hasta el amanecer los pies y los brazos. Han surgido locuras nuevas en las cabezas lunáticas. Y todo ha vuelto a ponerse en su sitio en esta mañana de este mundo. Pero con resaca de horas. Pero tocando a su fin esta artificial manera de volverse enajenado. Un ejemplar de primavera cruza la calle sin mirar. No ve a los coches cuando va a por pan. La dureza de la mañana le ha hecho dudar de su propia sombra. La noche fue divertida; la mañana, llena de luz, demasiada luz. No dice adiós, tampoco espera. Por la luz matinal se escapan las avenidas nocturnas que paseaste ayer. Todo por diversión. Todo por darle al cuerpo la tensión adecuada para romper con tu realidad.
La noche: locura llena de artificios.
La mañana: traza la luz las formas de la vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario