Así como los periodistas escriben sobre la actualidad, yo escribo de algunas actualidades o sentimientos que me recorren. Yo estoy atorado en un presente que se repite. No hago más que levantarme y recorro, como un autómata, unos actos iguales todos los días. Supongo que este recorrido vital lo hace mucha gente, no solo yo. La vida, la mayor parte de tiempo, es hacer lo mismo todos los días. La manera de combatir esta monotonía maldita es dotarla de sentido. Pero yo, a veces, no sé o no encuentro el sentido de esa repetición. Y por eso escribo aquí, porque aquí, en este blog, rehúyo un poco ese hacer y hacer de ayer y de hoy. Y me descargo. E invento. Y me pueden los renglones torcidos que escribe Dios para mí.
Los renglones van bajando en la página.
Y me alivio un poco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario