Ya llevamos 41 días de verano. Faltan 71 días para que termine. Va a ser como una película mala de miedo todo, me lo huelo. Pero no me asusto. En mi familia todo funciona de manera racional pero rara. Se dan muchas vueltas para ir al mismo sitio. Se pone uno nervioso y nos ponemos todos nerviosos.
Hay que ser muy hijo de puta para asustar a la gente con otra ola de calor. El que haya visto el telediario de la primera se habrá dado cuenta de cómo mienten los meteorólogos. Que si 43 grados, etc., etc.
La primera es una mierda porque no cuenta la verdad.
A ver si podemos hacer Paco y yo una escapada al pueblo para relajarnos.
La vida va a ráfagas a veces. Como te pille una ráfaga fuerte, te manda al garete.
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