He estado a la biblioteca. Se estaba fresquito. Se aprende mucho en la biblioteca y se está bien. He leído los dos periódicos que me faltaban. Luego, he tomado un chocolate. Me he fumado un cigarrito. Había dos jóvenes hablando de combinaciones de colores para sus prendas de vestir. Hablaban del azul y el beige y del azul y del naranja pálido. A lo mejor iban a una boda o algo pues uno ha dicho: fulana va a ir muy guapa. Luego de meterme entre pecho y espalda el cilindro, me he subido a la sala de lectura y he cogido tres libros de la estantería. No me ha gustado ninguno. Uno era de una crítica al nacionalismo vasco pero no lo he entendido muy bien. Otro era de una actriz a la que violan y dan una paliza. Muy tétrico. Y el otro ya ni me acuerdo. He ido a ver a mis padres. Mi padre ya no estaba "abollado", como dijo el otro día. Les he preguntado quién había venido esa mañana y no me han sabido decirlo (mi padre estaba a la compra y mi madre no se entera).
Mi familia es un puzzle de difícil encaje. A ver si nos comunicamos más pues esto parece una panda de sordos agilipollados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario