Edu no libra más que los martes y hace muchas horas extras. Yo no quiero a los monstruos, porque los monstruos son ininteligibles. Franquestein, Drácula, la momia, tiburón, son entes asquerosos, sibilinos y que solo buscan el mal de los demás. Yo leí "Papá Goriot" y me di cuenta de lo miserable que llegan a ser los monstruos que nos rodean. A los monstruos no los quiere nadie, son psicópatas, son avariciosos, tienen pasiones muy bajas, dan asco en resumidas cuentas. Los que hacen cosas solo por el valor material de las cosas, habría que guillotinarlos, matarlos, quemarlos vivos para que vean que ellos también son materiales y que, si les cortan la cabeza, mueren. Solo creen en el cuerpo, al que adornan con mucha galantería, solo creen en el dinero, al que adoran. Ojalá todos los monstruos de este mundo murieran de un plumazo. Todos fusilados.
Frente al pelotón de fusilamiento
se acordó de Dios, ese fundamental Señor al que negó toda la vida.
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