jueves, 30 de diciembre de 2021

Una persona típica del siglo veintiuno, que había "triunfado en sus objetivos", que había "demostrado al mundo su valía", que era más quizá que los demás. Demostraba a cada paso que daba en su día a día que su orgullo y soberbia le hacían mirar al otro ( el otro, que los existencialistas decían era el opositor, el problema, y más ideas paralizantes de la convivencia natural del ser humano) con desdén, indiferencia y casi con asco. Pero esta persona flaqueaba en dos cosas que le hacían ser un personaje poco enraizado en su sociedad, como el personaje de El extranjero, de Camus. Era extremadamente supersticioso de tal manera que cualquier signo de la naturaleza, cualquier palabra que no le encajara o el comportamiento extraño de una persona o animal le descabalaban el día. Para asegurarse de que todo iría bien durante el día se leía por la mañana el horóscopo. Por otro lado, no soportaba los defectos de la gente con quien convivía y un profundo rencor le invadía día sí, día también. Por consejo de un amigo católico, empezó a leer la biblia y su carácter parece que se encaminó hacia unos derroteros más acordes con sí mismo y el resto de la humanidad.

Aportación de Francisco Moreno Herráez

 

Dionisio era, como se dice vulgarmente, un hombre hecho a sí mismo. Estudió arquitectura y era un gran trabajador. Cuando tuvo la ocasión su audacia le indicó la manera de hacer dinero fácil con el negocio de las inmobiliarias y así se hizo un gran potentado. Asociado a los negocios estaba el poder, la liberalidad sexual y los placeres, y este hombre supo disfrutar todo lo que pudo desde su postura de adinerado en la sociedad que le tocó vivir. Cuando llegó a la mediana edad, empezó su particular batalla por la vida. Al hacerse una revisión médica anual le detectaron niveles altos de ácido úrico. El médico le avisó de que debería cambiar los hábitos alimenticios. Pero no le hizo caso. Hasta que empezaron a darle dolores en el dedo gordo, intensos y agudos. El médico le sugirió lo mismo, pero Dionisio replicó: es mi enfermedad, qué le voy a hacer yo. Al cabo, le cortaron el pie. Ya no era el Dionisio de antes que ligaba un montón, se daba grandes bacanales con sus allegados y disfrutaba de todo lo que se ponía a tiro. Ahora llevaba un bastón y no encajaba tan bien con esos cuerpos cuidados a base de gimnasio y de gente litgh, como él los llamaba. Por último, se le detectaron aminas en sangre, el hígado algo tocado. El médico le dijo que debería reposar, que le vendría bien romper con su ritmo de vida, una estancia prolongada en un balneario, quizás. Dionisio esgrimía que era su enfermedad y que ya se curaría sola, que le dejaran en paz. Que él llevaba una vida sana y que no entendía las cosas de los médicos. Al cabo de unos años vemos a Dionisio en una cama de hospital, arrengado y maltrecho, listo ya para vérselas con la parca. El médico le fue a visitar, ¿por qué no me hizo caso don Dionisio? Éste le espetó que le dejara en paz con su enfermedad, que dentro de unos días me darán el alta y a vivir.

El médico reflexionó: verdaderamente era su enfermedad.

Aportación de Francisco Moreno Herráez

martes, 21 de diciembre de 2021

Voy a contar una historia que pasó hace bastantes años. El protagonista era un chaval llamado Poncio. Su padre era un potentado de la capital de un país llamado Parodia, poseía varias inmobiliarias y era propietario del 15 por ciento de las viviendas de la capital. Cuando Poncio cumplió los 12 añitos, su padre le preguntó: hijo, ¿qué vas  a hacer cuando seas mayor?  El hijo muy ufano contestó: seré el delantero del Imperial CF. Al padre le dio un escalofrió en el corazón y un pequeño calambre en el cerebro y amonestó a Poncio diciéndole que no todo era el fútbol, que hay que mirar el futuro, que hay que tener los pies en el suelo etc. Pero el hijo le calmó diciendo que estudiaría una carrera de gestión empresarial para supervisar los bienes familiares y que un buen jugador de fútbol debe tener estudios para que no se rían de él. Siguió diciendo que el Imperial CF era el mejor equipo del mundo y que su objetivo en la vida era meter un montón de goles para ese equipo.

La estrategia de Poncio no sería directa, jugando en un filial del imperial porque era usual ser cedidos a otro club, sino jugar en un equipo de menor categoría y allí mostrar su valía. Con 17 años ya jugaba de delantero en un equipo de una cercana ciudad a la capital y empezaría la universidad con un currículum impresionante. Su papá estaba orgulloso de él.

Su técnica, su bravura y su lucha en el campo de juego le hacían un delantero que metía muchos goles. Pero su ambición y espíritu competitivo le hacían amonestar a los defensas cuando se despistaban, cabrearse con el árbitro, chulearse y hacer cortes de mangas y humillar al adversario cuando ganaba su equipo y poner en solfa al entrenador. Éste le dejaba en el banquillo y le daba consejos, pero Poncio no hacía caso porque sabía que tenía al público en el bolsillo y pronto se oían los gritos desde las gradas " QUE JUEGUE PONCIO, QUE JUEGUE PONCIO" Al final el entrenador tenía que rectificar y Poncio, con gran resolución evitaba un empate o remontaba el partido con tres o cuatro pelotas que le llegaran. Pero su carácter no mejoraba, los compañeros de juego le temían, al igual que el entrenador y seguía con sus broncas que enardecían a las gradas, que lo adoraban.

A los 22 años pensó que era momento de escribir una carta al Imperial CF para solicitar el ingreso en sus filas. Cada día que pasaba sin correspondencia era un infierno para él. Al fin, un domingo por la mañana, con la resaca a cuestas del sábado, abrió el buzón de su correo y halló en él la carta tan deseada, prácticamente la destrozó de los nervios que tenía, el remitente era su amado Imperial CF. Le extrañó que fuera como un telegrama, pero pronto pudo leer: 

          El Imperial CF no ficha a PREPOTENTES

La rabia que le entró le hizo que saltaran lágrimas de sus ojos, tiró sillas contra la pared, rompió jarrones a puñetazos, destrozó todo lo que tenía delante...

Como los amigos que tenía estaban aburridos de él porque siempre hablaba de fútbol y no había noviazgo a la vista, una tristeza profunda anidó en él. Con la excusa de que se iba de fin de semana les dijo a sus padres y a sus dos hermanas que no le esperaran. Se dirigía a un camino sin retorno. Había oído hablar de hoteles cercanos a acantilados donde gente desesperada se despeñaba por ellos. Su objetivo en la vida no se pudo realizar. Su existencia no tenía sentido ya.

Fue al hotel. Reservó dos noches. Se metió en la habitación. Trató de mentalizarse para algo que le superaba, pero su mente y su corazón le exigían que acabara con su gran frustración. Abrió la ventana para despertarse con la luz del sol. Era una zona prácticamente deshabitada y no vio a nadie, así que por la mañana no habría mirones. Estuvo tumbado en la cama hasta que de madrugada se durmió. Una luz deslumbrante le despertó. Se dirigió hacia el acantilado como un zombi, pero cuando estuvo en el borde se acojonó, miró abajo y sintió como un gran mareo, se puso a vomitar, tenía miedo, se sentó, cogió aire y lo intentó de nuevo, pero ahora no tenía miedo sino pánico, veía las olas chocar contra la roca y le asustaban. No puedo, se dijo, tengo miedo.

Empezó a frecuentar pubs de su ciudad con clientes parecidos a él, solitarios, con ganas de escarceos amorosos, sin complicarse la vida y charlando con unos y con otros. Así se despejó poco a poco de sus locuras y empezó a conocerse a sí mismo. Fue reconociendo sus errores, su fanatismo y su locura de acabar con su vida.

A los cinco o seis años a Poncio le vemos convertido en monje de un monasterio enclavado en una gran montaña. Cada vez que oye las noticias deportivas, que sus hermanos escuchan en una pequeña radio, no puede evitar disimular una sonrisa burlesca al escuchar que el Imperial CF ha perdido un partido, una liga o una copa de Concentración de Interpaíses.

Participación de Francisco Moreno Herráez

lunes, 20 de diciembre de 2021

Los ríos se vuelven meandros cuando llegan al mar. Los ríos llevan mucha vida amenazada dentro. Salvemos los ríos que van al mar. El río que yo sueño surca tierras abandonadas, recorre tierras baldías, fluye solitario y grande. El río que yo sueño no es pequeño. Es un gran río. No se ve el otro lado. Orinoco. Nilo. Amazonas.


Cotos. Calor. Aparcamos el coche. Subo por la ladera del monte por el camino. Es julio. Empieza el frescor de la montaña. Voy con una vieja amiga. Subiendo. Subiendo. Voy por una trocha. Voy muy contento. Al final, cuando llegamos a la cima, me echo un cigarrillo y observo al riachuelo. Qué a gusto estoy. Estoy fresco y libre. Cotos. Es julio. Hace calor. 

domingo, 19 de diciembre de 2021

 No me gustó un psiquiatra que tuve yo antes de estar en la Seguridad Social que era muy reservado, callado y perdonavidas. Pero bueno. Allá él. Ahora tendrá 70 años y no habrá caído bien a ninguno de sus pacientes. Era un  tipo que no hacía más que preguntar y poner la oreja pero nunca daba consejos ni hablaba con confianza conmigo, como si yo fuera un niño o un tonto. Pero con su pan se lo coma ese tío; ya digo, tendrá ahora 70 años y será un amargado pues no ha disfrutado de su profesión. Yo sí he disfrutado de mi profesión viendo cómo los niños aprendían conmigo e incluso me han hecho regalos, hemos hecho fiestas en el aula, nos hemos divertido cuando, después de dar yo la lección, les contaba algún chiste.

La verdad es que la profesión se lleva por dentro. Yo he amado ser profesor y amo ser escritor. La pena es que es muy difícil publicar en este país porque te piden dinero.

He oído a Sánchez esta mañana de domingo hablar en la ONU?: ha estado correcto. Ha hablado del volcán de la Palma, del coronavirus, de Afganistán, del medio ambiente, etc. Pero al final, cita a un regeneracionista creo que socialista al que le preguntaron que para qué es la libertad y él contestó: para ser libres. Pero eso es una perogrullada. ¿Para qué habrá dicho esta cita al final de su discurso? Cristo dijo que la verdad nos hará libres, pero "la libertad nos hará libres" es una redundancia, una obviedad, una tautología. Y lo usa para acabar su discurso, ya digo, muy correcto pero absurdo en su final.



El lunes, si me llaman para ir al CSM, iré pero con mucho cuidado de que me quieran hacer algún daño. La gente es muy aviesa y en el CSM me da la sensación de que hay un mal rollo que te cagas. No sé si serán envidias entre los mismos psiquiatras o no sé qué habrá allí pero ese sitio me da muy mal rollo después de lo que pasó el jueves. Me imagino encontrarme con la directora del centro, que se llama Dra Arce y verme en algún aprieto. La tal González, que me dijo por teléfono que íbamos a hablar del dormodor tampoco me da buena espina. Los psiquiatras se vengan de aquellos enfermos díscolos con sus medicamentos. La verdad es que el jueves no pasó nada del otro mundo pero yo lo magnifico. Mientras rellenábamos las reclamaciones, Paco habló de que él había sido taxista y que cumplía unos horarios. En ningún momento insultamos a nadie, solo dimos alguna voz porque nos trataron mal. En el restaurante donde comimos nos dijeron que lo que teníamos que haber hecho es denunciar a la policía porque las reclamaciones no valen para nada. Podríamos haber llamado a la policía pero tampoco es plan. A ver que me depara el lunes mañana y daré por bueno si la consulta con la tal González es un puro trámite hasta que nos asignen a mi hermano y a mí un psiquiatra. Los compañeros del "tú decides" Gorri, Oscar, Luis y Manuel tampoco tienen psiquiatra. A Oscar le han llamado la atención por llamar al CSM para sus volantes para las analíticas. Esto es un cachondeo.

sábado, 18 de diciembre de 2021

 En estas navidades, unos comerán y beberán felices y otros pasarán un mal trago. Es así: la fortuna se reparte desigualmente durante todo el año y más desigualmente estos días en que los problemas se agudizan para los tristes. Como dice la canción de Rosalía de Castro: "maio longo, maio longo, para unos telas de bodas, para otros telas tristonas". La vida es así y hay que aceptar lo que venga. Yo, hace una semana, por poco me vuelvo loco de no dormir. Mi primo Perico está luchando contra un cáncer. Es todo muy penoso de vivir pero si se vive la vida con fe, hay alguna esperanza de que todo mejore o vaya mejor. La sonrisa, creo, no hay que perderla del todo porque es la que nos anima. Mi prima la del pueblo me dijo un verano: "no queremos vinagres". Lo decía por mí porque yo no quería estar en el pueblo y estaba amargado pero hay que hacer un poder y seguir adelante con la vida.


Como decía un jefe de estudios que conocí en un instituto: "estoy de mierda hasta aquí" (y se señalaba el cuello) "pero tiro para adelante"

Me hacen gracia las personas que desprecian la lectura por simple de los libros de autoayuda. Yo reconozco que algunos son un poco extravagantes, otros pecan de tecnicismo y a lo mejor algunos son casi infantiles. Pero lo bueno de ellos es que se leen fácilmente y entretienen mucho, su lenguaje es ágil, aunque todo el libro no te diga nada algo siempre aprovecha, están llenos de sentencias de sabios, te orientan en algún sentido, te abren un poco la mente, aprendes cosas que no te cuentan los periódicos o los libros mamotretos y sobre todo son un gran auxilio para las temporadas en que tienes una mente empanada y necesitas un arranque para ponerte a leer. Reivindico la figura del libro de autoayuda porque alguien, en algún momento se preocupa de la gente y decide que puede escribir un consejo en forma de un libro entretenido, ameno y fácil de leer. He descubierto que aquellas personas que echan pestes de estos libros se descubren ante mí, al cabo del tiempo, como analfabetos funcionales, chulos de libros baratos de romances tontos de escritores ineptos, o payasetes que presumen de haber consumido filosofía de la buena, de esa filosofía que solo entienden cuatro gatos y que está caduca y no sirve más que para echarla a los perros. Sin embargo, aunque se tache de filosofía barata a los libros de autoayuda, es una filosofía para la gente, no para clasificar galaxias ni descubrir la estructura del sistema ontológico-enteléquico de turno.

Aportación de Francisco Moreno Herráez

La tarde decaía, aún no llegaba el invierno, distintas vicisitudes hacían de estos días previos a las fiestas de Navidad algo tortuoso de vivir. Pero algo anidaba dentro del corazón de aquella persona con enfermedad mental que le permitía seguir adelante. Él creía en Dios y sabía que sus caminos no eran los mismos que los de los hombres, era una frase manida pero Dios escribe recto con los ... No sólo creía en Dios, por lo demás, sino que estaba seguro de que Dios existía. Y no le hacía falta reconocer las vías de Santo Tomás de Aquino, ni que el alma pesa 21 gramos exactamente, comprobado científicamente, ni por supuesto tenía ganas de leerse la "ciudad de Dios" de san Agustín aunque pensaba que era una obra admirable, etc. Solamente tenía que pensar en lo perfecto del mundo, visible a poco que miremos la estructura vital de un árbol, el vuelo grácil de los pájaros y su trinar tan armónico o cómo el Señor es tan excelso que nos da libertad para equivocarnos del sendero para luego volver al redil y perdonarnos y ser perdonados y así con todo, desde lo más grande a lo más pequeño. Y se alegró de que Dios era tan amable de venir con nosotros y hacerse igual a nosotros una noche feliz, en un pesebre, y de traernos la esperanza de que siempre existirá una luz que nos guía y nos defiende : Nuestro Señor Jesucristo.





 La política en España hoy en día es una fábrica de insultos y odios; un galimatías que ya nadie entiende; una fabricadora de embelecos; una semilla de odios futuros; una engañifa colosal; un enfrentamiento continuo; una avasalladora de la libertad de opinión; parece ser que estamos en democracia y tenemos libertad para opinar pero el pensamiento único y lo políticamente correcto coarta en algunos ciudadanos decir lo que piensan. Los políticos parecen mamarrachos de bar diciendo paridas a todas horas. Es una fuente de promesas que no se van a cumplir porque no hay medios humanos y técnicos para hacer nada. Lo que les mola a los políticos es decir la ocurrencia más sarcástica y burda del día. La política española funciona peor que el coño de la Bernarda. Los políticos españoles, amén de mal preparados son gente ladina y mala, no son ejemplo para nadie. No sé ni por qué votamos a tanta bazofia. Mienten aunque revienten. Va a ser que no.

Y no sigo.


 Dice Marco Aurelio en su libro IV, apartado 28: carácter avieso, afeminado, terco, salvaje, brutal, pueril, blando, falso, escabroso, interesado, tiránico.

¿Existe una persona que tenga tales dones en el mundo? ¿O Marco Aurelio hace una lista de la que hay que escoger rasgos para aplicarlos a alguna persona en concreto?

En mi vida me he encontrado con salvajes pueriles, con falsos tiránicos, etc. etc. etc.

Pero hay que saber llevarlos porque ellos no se dan cuenta de que son así.

Hay que ser fiel a la vida y transigir con personas que parecen bestias porque Dios les ha dado vida.

Hay que ser buenos siempre incluso con los malos, porque nos va mejor que cabrearnos y ofendernos. Tendrán su merecido los malos más adelante.

 Después de que me atendieran en urgencias la madrugada del día 11, sábado, dándome una pastilla y metiéndome en un box desde las 4 de la mañana a la una del mediodía, nos dan el informe de alta y nos pone en él la palabra "preferente" subrayada. Desde el CSM (Centro de Salud Mental) nos llaman que fuéramos el martes 14 de diciembre a las 12:30 del mediodía. Nos tiramos toda la mañana en CSM y nos dicen que no hay psiquiatra. En teoría, nos tocaba con una tal Donés que acababa de firmar su contrato. Luego nos llaman por teléfono para que vayamos el 16, jueves, a las 12:30 otra vez. Mi hermano, al entrar, le dice a la secretaria morena que está en ventanilla: " es nuestra primera cita con esta psiquiatra y venimos a avisar". La secretaria morena le dice a mi hermano: "tú eres paciente antiguo. Siéntate y espera." Esperamos hasta las 13:20 distrayéndonos como podemos: fumando fuera, jugando en el móvil, dando paseos... A esa hora, ya pasada casi una hora y ya nerviosos, nos acercamos a la secretaria morena y le decimos si hay psiquiatra o no la hay y la secretaria morena lo que hace es darnos la espalda. Allí estallamos mi hermano y yo y la damos voces: "no nos dé la espalda". Nos ponemos nerviosos. Paco pide unas reclamaciones que rellenamos. Viene la secretaria morena a apaciguarnos después de habernos provocado. Dice la secretaria morena: "me extraña que no os haya llamado". Y yo le digo: ¿que no nos haya llamado quién? Rellenamos como podemos la reclamación. Paco pregunta hasta cuando es el turno de mañana y no nos contestan. Paco habla muy nervioso sobre que había sido taxista y que tenía unos horarios que cumplir. Nos vamos de allí al campo, al monte del Pilar, a ver si nos serenamos. Nos encontramos con una chica de la asociación. Comemos en un sitio que se llama Xinito. Pasamos la tarde paseando y un tanto nerviosos por lo que nos ha pasado. Por la noche, duermo bien. El viernes por la mañana, me llama una tal González y me dice que vaya con ella a hablar " del dormodor" y que si estoy afectado por lo de ayer y yo le digo que no voy, que he dormido mal y que me duele la espalda. Cuelgo y paso el día normalmente: por la tarde vamos al Pardillo a relajarnos. Mi hermana llama por la tarde pero yo le digo que nos deje hacer a nosotros, que no se meta en nuestros rollos. Luego, a la noche, llama Pura y yo le digo que no me ha dado la gana ir a la psiquiatra. En un tono muy fúnebre, me dice: "te has quedado sin psiquiatra." No sé si me he quedado sin psiquiatra pero no quería ver tres veces en una semana a la secretaria. La verdad es que si hubiera ido a la psiquiatra habría dado la razón a  la secretaria y no me daba la gana. Se da el caso de que cinco o seis amigos míos de la asociación "tú decides" tampoco tienen psiquiatra porque el que teníamos, un tal Víctor Pérez Plaza, se ha largado del Puerta de Hierro. La tal González esa a mí me mosquea mucho. Habrá que tener mucha mano izquierda para lidiar con una posible mala mujer. El lunes, si me llaman, estaré más tranquilo, habré olvidado un poco el mal rollo del jueves.

viernes, 17 de diciembre de 2021

 Hay ciertos pueblos, o pueblos-ciudad, que sufren de corrupción desde la base de los mandatarios municipales y pasa una vez y otra y así. O sea, que quiero decir que un alcalde es elegido y mire, mire por allí mire, mire por allá y se llena los bolsillos y a criar, como se dice en el argot cinegético. El pollo se va de rositas porque sus conciudadanos consienten en su gran mayoría, la minoría nos aguantamos porque hay que callarse y el pensamiento único y lo políticamente correcto son emperadores de nuestro tiempo, al que habla de más, colleja o corrección pedagógica de la petarda o petardo de turno, que vigila, feliz en su intransigencia y galbana mental al del "libre albedrío" y lo pongo en comillas, Dios me libre de molestar. Mientras tanto, los adoquines de las aceras están en mal estado, hay bebedores por todos los jardines públicos, que es algo ilegal, me refiero a los botellones, claro, no se comienzan infraestructuras necesarias para mejorar edificios antiguos que se caen a cachos y les pido mucho perdón por lo que escribo y les molesto, no quisiera yo disgustarles, bastante tienen con lo suyo para escuchar mis majaderías, sin más, un pobrecito contribuyente.

Aportación de Francisco Moreno Herráez

jueves, 16 de diciembre de 2021

 Si pones en internet, Joaquín Sabina, Juana la loca, sale: video no disponible. Es la censura. En una canción de Krahe, en la que dice algo así ( no lo sé ciertamente pero se ajusta mucho): qué bueno el gazpacho, me trabajas muy bien (por su mujer), no creo que esté disponible. El machismo es lo que tiene, que se va arrugando, arrugando, mientras el hembrismo va creciendo, creciendo y volviéndonos locos. Aquí se trata de llegar a un entendimiento, como en todas las cosas. Pero no se llega, todo se quiere imponer.

 He tratado de averiguar por teléfono qué clase de tratamiento tuve en Puerta de Hierro a mi ingreso y todos eran pegas e inconvenientes. Al final, he conseguido convencer a un operario para que me digan qué medicamento me dieron a las 4 de la mañana del viernes para dormir en un box. Me dieron olanzapina, que es ziprexa, pero para decir simplemente eso, me han puesto muchas trabas. El paciente tiene derecho a saber qué tratamiento recibe en urgencias y tiene que constar en el informe de alta. El tipo del teléfono me decía: ¿para qué quiere saberlo? Pues porque soy el paciente. Si los médicos fueran más transparentes con las operaciones que hacen a los pacientes, mejor para médico y paciente. La psiquiatra de urgencias de psiquiatría me ha hablado con desdén y chulería por teléfono y me ha dicho que lo que yo preguntaba estaba en el informe. Pero no estaba. Ocultación y mentira.

miércoles, 15 de diciembre de 2021

Esta noche he logrado dormir de 12 a 2 y luego de 5 a 9. Me encuentro bien, un pelín cansado. He jugado solitarios en las horas de insomnio. No he fumado mucho, creo. La tendencia es buena. A ver si la noche que viene duermo de un tirón. Paco y yo comemos de menú pues yo no estoy para cocinar y Paco no sabe. Damos buenos paseos por la tarde par ir cansado a la cama. Me está costando escribir estas letras, síntoma de lentitud mental. Cometo muchos fallos al escribir. Pero bueno, el jueves veremos a la psiquiatra de Salud Mental a ver qué nos dice. Teníamos cita preferente pero parece que la psiquiatra que nos tocaba se le ha acabado el contrato o no sé qué y en vez del lunes pasado nos atenderán el jueves. Yo no sé cómo iré evolucionando. Ojalá empiece a dormir como antes. La verdad es que lo estoy pasando jodido.

El invierno ha despojado a los árboles de hojas.
Desnudez.
Pudor. 
Estoy sentado aquí mismo.

martes, 14 de diciembre de 2021

Quiero hacer una advertencia a los lectores de este blog: lo primero, que yo no suelo mentir; segundo, que si alguien se ofende con mi blogs, ahí tiene la posibilidad del COMENTARIO para quejarse o lo que sea; tercero, que si yo hablo de mi familia es porque comprende cuatro generaciones y eso es aleccionador para el lector para que vea ciertos comportamientos en gente que nació en el año 30, otros en el 40, mi hermano y yo en el 60 y la otra generación en el 80; cuarto: que si yo hablo de mi familia es para desahogarme de ciertos comportamientos que no me gustan y ya digo, el que se pique, ahí tiene la posibilidad de comentarlo. YO NO OBLIGO A NADIE A LEER MI BLOG. Quinto; este es un blog personal, que habla de mis cosas pero también de medio ambiente, de poetas del pasado y  por supuesto, yo tengo TODA LA LIBERTAD de hablar de lo que me parece. Si alguna vez he sido grosero o he faltado a la verdad, que me lo digan en el comentario y yo ya veré si lo borro o no: como sea verdad, lo más seguro es que no lo borre. Yo ya digo, este es un blog personal. Yo he visto otros blogs que se dedican al cine, a los juegos malabares o al coño de la Bernarda. ESTE BLOG ES PERSONAL; o sea, hablo de mis cosas. Me extraña que no haya ni un puto comentario en estos 10 o 11 años que llevo escribiendo. La verdad es que este blog nació de un fracaso: yo dejé de ser profesor y no sabía cómo matar el tiempo. El que se pica, ajos come, dice el refrán. Yo no pretendo darle ocasión a nadie de comer ajos, pero como dicen los gauchos: "cuando encuentro la verdad, yo la mando derechita".

 Hace un año o dos, mi hermano y yo nos gastamos una pasta en regalos para la familia (todos tuvieron su perfume). Y todos parecían contentos con su frasco. Llegado el día de nuestro cumpleaños, he aquí lo que recibimos por regalo: de mis sobrinos de parte de hermano, dos tazas y unos caramelos asquerosos. En las tazas ponía "sonría por favor" o algo así. De parte de mi hermana y mi cuñado y su hijo y nuera, un vale con el que comeríamos en Valladolid comida extraña. Este regalo fue más novedoso, porque así visité Valladolid y me lo pasé bien pero la comida dejó mucho que desear. Le agradezco el regalo a mi hermana y a su familia porque hizo que Paco y yo viajáramos aunque sea un poco y disfruté de las calles de tal capital castellana todo lo que pude. Me vino bien ir en autobús viendo pueblos, vi la estatua de Zorrilla, vi el parque tan bonito, compré libros de lance... A la hora de comer solo recuerdo que, al ponerte el plato, el camarero explicaba qué ibas a comer. Lo más gracioso que oí fue: "esto es cabra, primo del cabracho, con reducción de tomate y emulsión de perejil". Yo regalaría algo a la familia de mi hermana porque se lo merecen. Pero creo que no haré ningún regalo más. Un dato más: nunca me han preguntado ni mi hermana ni mi cuñado qué tal por Valladolid o qué tal lo que comimos.

Ni el insomnio ni el estreñimiento se lo recomiendo a nadie. Si este último te coge en mal momento, lo pasas fatal. Es un querer y no poder. Como aquellos que sueñan con que les toque la lotería o una herencia para resolver sus asuntos económicos. La verdad es que si uno no duerme o no caga, todo el sistema entérico sufre mucho, el sistema nervioso también. El cerebro, también y el ojo del culo, más aún. Yo tenía un amigo que sufría muy a menudo estreñimiento. Le recomendaron pastillas pero el estreñimiento no paraba de hacerle daño. Hasta que averiguaron que el tema del estreñimiento era mental, que estaba cuidando a su padre anciano y eso de cuidar le producía angustia y la angustia, el estreñimiento. El padre de mi amigo sigue vivo y es hombre de buen humor, pero Pedro, mi amigo el estreñido, se le ha quitado todo el humor pensando que la casa de su padre iba a ser suya pronto. El anciano padre del estreñido amigo mío tiene 85 años y una soltura y un buen humor muy grande. Pero Pedro le tiene que cuidar. 

Tengo un estreñimiento atroz. Serán las pastillas que me han mandado por el tema del insomnio. Llevaba la semana pasada días sin dormir. El viernes estuve hasta las 4 y no me dormía. Era una desazón grande. Me levantaba de la cama, fumaba muchos cigarrillos, iba a la cocina a comer cualquier cosa, me paseaba por la habitación, etc. Ese viernes, a las 4 de la mañana, me vestí y ya en la calle, pedí un taxi. Vino pronto una taxista que me dijo: ·"tú eres el tío de Carlos". No sé cómo coño me conoció. Entonces empezó a hablarme de mi sobrino en unos términos alabanciosos a más no poder: que qué majo Carlos, que yo le quiero mucho, etc, etc. Una vez en el hospital, no esperé mucho a charlar con dos psiquiatras de género hembra y después me dieron una pastilla diminuta, me metieron en una habitación con cámara y yo allí pasé las horas muy mal: sentía algo muy malo por la mente y por el cuerpo. Quería que pasara la noche todo lo rápido posible y miraba el reloj cada dos por tres. No recuerdo cuándo vino Paco. Me compró el diario para pasar el rato y a eso de la una del mediodía, nos dieron el alta y nos fuimos. Yo estaba cansadísimo y muy confuso, muy confuso. La verdad es que el insomnio es muy duro de llevar. No se lo deseo a nadie.


lunes, 13 de diciembre de 2021

 "Te has saltado el turno, Jhony". Jimmy ha tenido que pasar toda la tarde vigilando la garita". Jhony miró a otro lado. "He dicho que te has saltado el turno". Jhony siguió mirando para otro lado. Robert lo dejó por imposible y siguió su camino. Sentía que no podía hacer otra cosa por Jimmy. Por lo menos se lo hacía saber a ese soberbio de Jhony. Jhony vino de Wisconsin hacía ya tres años y pretendía el cotarro de las cosas. Era feo, manipulador y petulante. Vino a Nueva York en barco y estaba jodiendo todo el montaje pero también hacía cosas buenas para la empresa, lo que pasa es que todo lo hacía de modo imperioso y como si mandara en la empresa más que otros.

Un día, uno que se cabreó con él por la cuestión de los turnos, le llamó hijo de puta. Jhony cogió un palo y le dio en la cabeza. Hubo un juicio pero Jhony se salvó de la cárcel y del despido. El jefe trataba muy bien a Jhony, nunca supe por qué. Jhony siguió haciendo de las suyas hasta que un día fue al hospital por un tema de diabetes y nadie le fue a visitar. Solo su padre anciano que siempre se estaba meando.

jueves, 9 de diciembre de 2021

Los gorriones no emigran. Pasan calor y sed en verano y frío y hambre en invierno si no fuera por aquellas ancianitas bondadosas que les surten de pan y agua. Los gorriones son, por lo tanto, estoicos, muy estoicos. Podrían dar lecciones a Epícteto, a Marco Aurelio y al mismísimo Séneca. Cito estos nombres pero me temo que son desconocidos para la mayoría de mis lectores pues no los han leído, solo los conocen de nombre (conocidos, no amigos). Me cabe una duda si de gorrión viene la palabra "gorrón". Es muy posible, ya que los gorriones son muy gorrones, chupópteros, pegadizos, adobados, pedigüeños. No les queda otra que mendigar al hombre, que es el ser más poderoso que hay por la Tierra y se sienta en un terraza y parece un basilisco de orgullo y preponderancia (tráeme una de bravas y un botellín y para la niña, una Fanta y tú qué quieres, gilipollas. Siempre estás haciendo el tonto, Borja, cómo hay que decírtelo. ¿Os imagináis un mundo sin gorriones? Yo no. Los llevo en los ojos y en mi alma casi. No son atractivos los gorriones, como lo son un jilguero o un periquito, pero son estoicos y no nos abandonan. Ni Marco Aurelio les gana en austeridad y fuerza para soportar males.

Ya lo decía uno: hay que aprender hasta de la brizna de una hierba.

 Esta noche he rezado mis oraciones a las 10 de la noche.

Y no me he dormido.

Y no me he dormido.

Y no me he dormido. 

He tomado pastillas.

Y no me he dormido.

Y no me he dormido.

Y no me he dormido.

He hecho cosas extrañas por el día.

Y no me he dormido.

Y no me he dormido.

Y no me he dormido.

He visto una película entera en la tele, de noche.

Y no me he dormido.

Y no me he dormido.

Y no me he dormido.

Me he tumbado en la cama por tercera vez.

Y no me he dormido.

Y no me he dormido.

Y no me he dormido.

A eso de las 5 de la madrugada, Dios se ha apiadado de mí.

Y he dormido.

Y he dormido.

Y he dormido.

Pero no sé cómo ha podido ser.

 Otra noche de insomnio y van dos. Estos días he hecho cosas nuevas, como quedar con mi sobrino, invitar a comer a Abdul, charlar con gente con la que antes no hablaba, tener proyectos como imprimir unas poesías mías en una imprenta, escribir una gramática cuya unidad fundamental es la "historia gramatical" o "párrafo gramatical" donde en vez de sujeto, hay protagonista; en vez de verbo, hay acción y en vez de objeto directo, hay objetivo. También se me metió en la cabeza enseñar a leer a Abdul y comprar cuadernos Rubio en la librería. No he tenido proyectos de viajar, sin embargo. Así ha sido la noche: pensar unas cosas y otras, unos proyectos y otros de futuro. Ya me veía en la imprenta explicando cómo deberían ser mis copias de las poesías, ya me veía en la librería preguntando por los cuadernos Rubio, ya me veía escribiendo mi gramática de la historia como núcleo de la expresión hablada y escrita. Yo creo que el hombre, cuando habla no piensa en oraciones sino en párrafos o historias que debe pensar y expresar en la conversación. La psicóloga me ha dicho que al acostarme, escriba en un papel las cosas que voy a hacer al día siguiente. Eso hice, pero no me puede dormir. Espero que esto sea pasajero y no vuelva a darme el insomnio. Hoy solo tengo que encargarme de hacer unas lentejas y nada más. Procuraré no salir mucho de casa para no recibir estímulos mentales que me exciten. Hoy es día para la calma pues se ha acabado el puto puente de los cojones.

miércoles, 8 de diciembre de 2021

Es duro luchar contra el insomnio. El otro día logré dormirme a las 2 de la madrugada; me tomé dos pastillas y una infusión y no me dormía. Oí la radio, vi la tele y por fin me dormí sin darme cuenta a eso de las 2, ya digo. Hoy temo no dormirme pronto tampoco, como el otro día. Cuando tengo muchas conversaciones con la gente, me pongo excitado mentalmente y duermo mal. Esta tarde hemos ido Paco y yo al zoco de Monte Rozas y después a otro centro comercial que se llama "La tortuga". Entre ambos centros comerciales hay un instituto donde trabajé solo una semana muy bonita pues recuerdo unos alumnos muy majos. Hemos parado en el instituto, que se llama Carmen Conde, que fue miembro de la RAE y he hecho unas fotos a unos dibujos de la fachada. Luego hemos ido a ese otro centro comercial y he recordado aquel tiempo muy bonito para mí. Hemos invitado a nuestro amigo Abdul a unas raciones en Xing Ping antes de dar esas vueltas. Abdul es buena persona. Trabaja en Abonos Alonso, en la carretera de El Pardillo. Le hemos visto andar para allá cuando íbamos a esa pequeña excursión pero no le hemos parado a llevarle a su casa. La mañana ha estado muy activa. Después hemos ido a Las Matas y unos policías nos han pedido nuestros carnets. En un bar había una mujer tremenda, muy tremenda, un lujo para la vista. La he mirado y remirado y hemos salido del bar. Luego hemos ido a ver a nuestros padres y ya estamos en casa. Eso es todo, amigos.

martes, 7 de diciembre de 2021

Jovellanos era asturiano. Hizo mucho por Asturias. También estuvo en Sevilla como fiscal de lo penal en los juzgados. Escribió poesía y teatro. Escribió una ley de reforma agraria. Estuvo preso, creo, en la torre de Bellver.  Participó en la Constitución de Cádiz, llamada la Pepa. Formó parte de la Junta de Defensa ente la acometida de los franceses en nuestro propio país. La constitución de Cádiz fue ejemplo para otras constituciones como la de los Estados Unidos de América. La constitución de Cádiz, mayormente fue redactada por gentes de la Iglesia y dice que la soberanía reside en el pueblo. La historia de España no es tan penosa como dicen. Luego, el nefasto Fernando VII se encargó de arruinar lo hecho y la reina Isabel II, con la que hubo mucho progreso, también tuvo sus cosas con los generalotes que la rodeaban. Fueron 3 guerras carlistas las que arruinaron España. Podríamos haber estado mucho mejor si no hubiera habido esa mierda de rey y esa mierda de guerras civiles sucesorias. Luego, todo fueron un pronunciamiento tras otro. Luego vinieron las guerras de Cuba y de África, con el desastre de Annual y luego, las dictaduras de Primo de Ribera y de Franco. Eso es todo, amigos. No se vayan todavía, aún hay más: el intento fallido de golpe de estado del 23F, la actuación soberbia y buenísima de Juan Carlos I en la Transición, junto con el PCE y Suárez y todos los dirigentes que supieron ponerse de acuerdo. Después 16 años de PSOE, Aznar, ZPedo y Rajoy y ahora el mentiroso de Sánchez.

Vamos a resumir las cosas desde el miércoles que fui a la psicóloga. Con la psicóloga hablé de que me gustaría pasar la nochebuena con mis padres. Ayer miré receta de nochebuena en internet. También hablamos de que mis sobrinos son muy trabajadores. También hablamos de que mi familia es rarita, es de esas que llaman desregularizadas. Eso quiere decir que no hay mucha comunicación dentro de mi familia y no se ponen puntos de concordia o de pensamiento unificado en las opiniones de unos y de otros. De todos modos, gracias a mi hermana, lo de la cuidadora de mis padres se ha solucionado. Nadie sabe la vida de nadie quizás porque no hay tiempo de convivencia entre los miembros de la familia. Otra cosa es que no nos visitamos a menudo: no vamos a las casas de unos los otros ni los otros a los unos. Solo de vez en cuando y cuando hay algo nuevo; por ejemplo, el nacimiento de mi sobrino nieto o un cumpleaños. Yo he llamado a mi sobrino Carlos y hemos quedado. Me divertí mucho con el niño Angelín. Luego voy a quedar con mi sobrino Gabriel y su mujer Patricia y luego, quedaré con Alberto, mi otro sobrino, y mi cuñada. Podríamos quedar con mi hermana y mi cuñado a comer pero parece que ya sería demasiado.

 He leído en mi libro de Psicología que es muy difícil encontrar el equilibrio neuronal de uno mismo. Hay neuronas que actúan ante estímulos como una mujer muy bella y sexy. Hay neuronas que te hacen fumar un cigarro cada diez minutos. Hay otras neuronas que son adictas a otras drogas más fuertes, como el alcohol y la cocaína. Hay neuronas que te hacen odiar al que no piensa como tú.

Pero está la razón. ¿Y dónde está la razón? En la membrana cortical del córtex. Y ahí ya no hay excusas.
Todos pensamos un poco y tenemos un mecanismo de autocontrol o regulación de la conducta que nos dice: no matarás, no robarás, honrarás a tu padre y a tu madre y no desearás a la mujer del prójimo. Hasta ahí, bien todo.
Pero hay otro mecanismo que se llama el sistema límbico que es el que tienen los lagartos. Y ese sistema nos hace odiar a los que follan mientras nosotros no follamos, a los que tienen dinero mientras nosotros no lo tenemos, a los que tienen amigos mientras nosotros no los tenemos y así hasta el infinito.
Pero luego hay otro sistema muy complejo, el cerebro en su conjunto, que tiene unas ramificaciones y unas sinapsis y unos receptores y el cerebelo y el bulbo raquídeo y la duramadre.
Pero eso no es todo porque tenemos piernas y brazos y ojos que ven imágenes y oídos que oyen ruidos y canciones y un sistema gustativo y olfativo que nos indican que somos seres sensoriales.
Y hay más: tenemos un corazón. Que late y late sin tregua de ninguna clase y al que damos unos disgustos de la ostia porque nos enamoramos y no de la o del adecuado.
Y hay más: tenemos picha y ellas, coño, que se juntan en verano y en otoño con una frecuencia inusitada en un mamífero. Pues ya lo dijo Juan Ruiz, que esa locura la queremos hacer a cada rato.
Y hay más: tenemos una sociedad y una política que nos gobierna o nos desgobierna según el caso.
Y tenemos guerras, la de Siria, por ejemplo, donde están luchando los terroristas del ISIS, los turcos, los americanos, los kurdos, los sirios y los rebeldes sirios y los rusos en un maremágnum bestial y la Tierra no descansará hasta que esos que están en guerra firmen la paz.

El hombre es el ser más complejo que creó Dios. Así nos va.

He tomado café en el "Sandama" con un vaso de agua. He pedido fuego a Manolo el gallego, que estaba charlando con un señor ya maduro. Martín se ha limitado a servirme. Nada que hacer más que comprar tabaco. Pero no tenía mechero así que he dado el paseo sin fumar. Luego, he ido a ver a mi madre y hemos visto "Juan de la jungla" con unas serpientes haciendo el gilipollas. También ha entrado ese Juan en un museo de las serpientes en Tailandia. Ha estado bien. Me ha saludado Sara muy efusiva. Siempre desea lo mejor a mi hermano Paco y a mí. A mi madre la llama princesa. No está mal porque la marroquí trabaja y cuida muy bien de mis padres. Mi madre la acepta, no como a las otras que las llamaba guarras. Eso del Qida es una puta mierda pinchá en un palo. Luego, he venido a casa y me he puesto a escribir esto. Mis padres son sabios. Yo me hago sabio al lado de ellos. Son analfabetos sabios mis padres. Me gusta estar a su lado aunque cuenten historias antiguas mil veces contadas. La vida, como la Parca, andan juntas y hay que tener cuidado. Yo me noto algo cansado del insomnio de anoche. La mañana pasa, como la torre de la cigüeña, como el trigo sembrado, como la luz de la mañana y como las histéricas que dan gritos sin tener que darlos.

Quizás mi sobrino Carlos, su pareja María y su hijito Ángel todavía estén en Barcelona. A mí me hubiera gustado ir a algún lado este puente, pero no he ido. El viernes pienso ir a ver a mi primo Perico a Segovia la tranquila. Tiene Segovia un cielo azul muy puro, muy puro que se te mete hasta el alma. Ayer le montó pelotera mi hermana a mi padre. Luego, hizo una tortilla de patatas para que cenáramos mis padres, mi hermano y yo. Váyase lo uno por lo otro. La vida es muy caprichosa. Yo , por ejemplo, ayer sufrí insomnio y no me dormí hasta las dos y media o las tres de la madrugada. Sufrí un poco.

La vida es como un carricoche: en ella vamos medio a disgusto a veces y otras veces llenos de alegría disfrutando del paisaje. La vida es una cuerda de la que se tira y cada vez que se tira, pasa el tiempo y nos hacemos viejos y luego, ya la cuerda llega al extremo y la nochebuena se viene, la noche buena se va y nosotros nos iremos y no volveremos más. Hay un dicho que dice: 

-Si tú supieras navegar, ¿te harías a la mar? 

-No, porque la mar es muy peligrosa 

-Pues lo mismo que no sepas navegar.

lunes, 6 de diciembre de 2021

Me llama mi hermana diciendo que hoy, día de la Constitución, lunes, nos tenemos que quedar esta tarde con los padres. Que ella les da de comer y se va. A mí no me importa pasar la tarde con mis padres; al revés, no tengo mejor cosa que hacer. Pero mi hermano y yo, el puente de Todos los Santos, que cayó en lunes, nos lo pasamos con nuestros padres entero. No veo yo que mi hermana sea especial y tenga que evadirse de su turno. Pero bueno: como dice mi psicóloga: mi hermana nos mete la confusión en el cuerpo y nos sometemos a sus mandatos, aunque sean arbitrarios y de poca lógica. En fin, pasaremos la tarde Paco y yo turnándonos y veremos alguna película o lo que haya en la tele, que es lo único que entretiene a nuestros padres. Yo iré a eso de las 3:30 y me pondré a charlar o a aburrirme en casa de mis padres o a ver la tele. La verdad es que aquí se saltan a la torera los turnos y no hay más que hablar. La tarde está triste, ¿qué tendrá la tarde? La tarde no tiene sol que le alumbre, ni perrito que le ladre.

Hoy me he levantado a las 9 de la mañana. Mi sobrino y su pareja y su hijito están en Barcelona. Ya habrán visto la Sagrada Familia de Gaudí o el barrio gótico o la zona de la villa olímpica o la Diagonal. No sé lo que habrán visto. Yo solo sé que no me voy de puente a ningún lado. "To" "pa" mí. La gran vía de Majadahonda para pasearla de cabo a rabo. No sé muy bien de qué escribir. Hay una chica en el Facebook que pone carteles con dichos de otros (Exupery, Charlot, Séneca, etc.) y lo firma como Sara Brickman. La insuperable Sara Brickman, que colecciona amaneceres en Lanzarote y en México y en Portugal. Bueno, yo no colecciono amaneceres porque me levanto a las 10, pero colecciono historias para escribir, amigos y días iguales. No tengo facilidad para viajar como la irrepetible Sara Brickman. La verdad es que hoy me he levantado con un dolor en la cadera. Espero que pase. No hay nada preparado para comer. Habrá que tirar de lata. La vida es más perra de lo que parece. La vida engaña a los sentidos y al pensamiento. La vida es así de perra: crees en algo y se deshace como un terrón de azúcar en un café con leche muy, muy caliente.

domingo, 5 de diciembre de 2021

 Carlos y María irradian mucha paz pero también mucho cansancio. Todo sea por el Angelín, que les sorbe el seso a los dos. Por lo demás, yo llevo una vida social grande en este diciembre, cosa que no me impide respetar el horario de acostarme a las 10 y descansar. He visto mucha gente últimamente y me lo he pasado muy bien. He llamado por teléfono a Antonio Salgado y me ha atendido muy gratamente, así que nuestra amistad continua, yo que casi la daba por perdida. Me ha dicho que está disponible en enero. Iremos a comer a Príncipe de Vergara como antaño. He acabado una novela de la manera más brusca: he matado al protagonista principal. Bueno. Se ha muerto de un ictus. Ya no sabía qué hacer con él. Ahora solo tengo dos historias que contar y las contaré rápido para meterme en una novela de 300 páginas en cuanto pueda. La verdad, la psicóloga a la que voy me ha puesto en la buena onda, como dicen los mexicanos y estos días pretendo pasarlos bien. Vienen días festivos y hay que estar dispuesto para la fiesta y pasarlo bien. Mis padres están en mi cabeza y los demás también. Espero pasar unas navidades llenas de unción y veneración a Dios que nace. Así sea.

Ayer lo pasé bien con mi sobrino y su pareja, María. Y sobre todo, con el niño Angelín, con el que jugué con un globo rojo atado a un palito. El niño es una preciosidad y saca la lengua discretamente cuando las cosas se ponen difíciles y se cabrea como una mona cuando se harta de estar en los sitios. Pero no creo que sea hiperactivo. No lo es. Se concentra bien en tareas propias de su edad, un año y medio. En una bolsita de clínex, yo le metía una tarjeta y él se afanaba en sacar la tarjeta y le daba alegría. Este ejercicio lo repitió al menos cuatro veces sin cansarse. Es un niño al que se le puede entretener. Los padres del niño los vi un tanto agotados, a mi sobrino con ojeras y chupado de mejillas. Parece que aguanta mejor el tirón María porque el niño, con ella, está muy tranquilo y quieto. Relaciono lo de mi sobrino nieto con la historia de Jacinta y Fortunata. Ya voy leyendo por cuando Jacinta compra al Pitusín, hijo ilegítimo de Juanito Santa Cruz. Este niño descabeza todo un portal de Belén, que en aquellas épocas eran como un juguete para los niños y hace estragos en la familia de la hermana de Jacinta. Estoy deseando ver cómo reaccionan Juanito y Fortunata ante la compra del niño. La cosa se pone tensa entre Jacinta y su suegra, al pensar esta última, con razón, que es un disparate de la nuera el haber comprado al niño a José Izquierdo, su tío, por 1000 reales. Y está por ver, también, si el niño es de Juanito Santa Cruz. Fortunata solo ha salido comiéndose un huevo y refiriéndose al capricho de rico de Juanito, que la deja después de haberla preñado.

Qué lectura la de "Walden" de Thoreau. Naturaleza en estado puro y un modo de vida alejado de la sociedad. Este escritor de la ilustración norteamericana se fue a vivir a una cabaña en el lago Walden y allí vivió cultivando y pescando y cazando. Nos muestra Thoreau, con una prosa cálida y buena, todo lo que hay en ese lago: animales y cómo se transforma del invierno al verano. Cómo son las ideas de este hombre lleno de libertad que no quiere pagar impuestos y quiere vivir libre en la naturaleza. Me acuerdo que describe una batalla de hormigas, habla de aves, de peces, de troncos de árboles que caen al lago, de los paseos por el bosque, etc. Lo tendrían que leer todos los adolescentes para que se hicieran una idea de lo que es el autoabastecimiento y la sabiduría de vivir. Es un libro precioso, recomendable para todo el mundo. Ojalá fuera lectura obligatoria en el Bachillerato.

Me he despertado bien. Ayer lo pase bien con mi sobrino, María y el niño Angelín. Luego vi la película de Clint Eastwood, "La mula" y estuvo muy bien. Tomé somníferos para dormir pues estaba excitado mentalmente. A ver si ahora quedamos con otro sobrino.

viernes, 3 de diciembre de 2021

Estos días de atrás hubo en Majadahonda mucho movimiento de coches, mucho alboroto de ir y venir de la gente: barruntaban el puente. Menudo puente. Todo el mundo menos Paco y yo y otras excepciones tristes, tiene plan para escaparse del trabajo en la dichosa ciudad. Ayer, Paco y yo íbamos a ir a Fresnedillas; luego, cambiamos de opinión y nos dirigimos a Móstoles; más tarde, cambiamos de opinión otra vez y nos dirigimos a Pozuelo, ciudad que dice Paco que es muy aburrida, donde no hay más que avenidas. Tomamos algo en Viena Capellanes de la avenida de Europa y paseamos por allí un poco y nos vinimos. La culpa la tuvo la opinión, que es muy veleidosa, como dice Marco Aurelio. No hay que tener opinión, sino certezas en la vida. Luego, compramos leche, manzanas y yogures, la base de nuestras cenas. Nos metimos en casa y ya no salimos en toda la tarde. Nos aburrimos otro poco viendo la tele, charlando de cosas insustanciales o tumbándonos en la cama a meditar. Meditar es la forma de dar al pensamiento un entretenimiento vago y difuso, pero que calma la mente. Después, nos acostamos y hoy hemos amanecido muy tarde, mucho después de que la aurora ya acariciaba los cánticos de los pajarillos, cuando la gente se despertaba para ir al trabajo, cuando incluso la ama de casa había hecho la compra.

jueves, 2 de diciembre de 2021

 Hay algunos que andan triscando como los burros por la dehesa y rebuznan de gozo haciendo las guarrerías españolas con la burra, que también se da a los placeres de la carne sin ningún remordimiento. Luego vienen los llantos y las tribulaciones por las consecuencias que trae eso de la coyunda. Que la chica se ha quedado chambrí y hay que hacer algo. Y enseguida se piensa en el aborto. Pero no. Porque hay gente que lo evita y da apoyo emocional y económico a esa chica a la que, quizás, el semental jovenzuelo le ha dado largas y ha puesto tierra de por medio. Y la chica no aborta, sino que tiene el niño y yo me alegro por ella y por el niño, que era ya una criatura en el seno de ella. La vida da muchas vueltas y la vida nos pone en ocasión de decidir lo bueno de lo malo, lo desesperado de lo cierto si nos ayudan. Y siempre hay alguien a quién ayudar y siempre hay gente a la que le gusta ayudar a lo mejor porque cree en Dios o en la vida o en yo qué sé qué cosa que hace que dos almas se ayuden para que algo salga bien. Amén.

 Son las 9 de la mañana del día  2 de diciembre de 2021. La mañana avanzará como nunca lo ha hecho. Irá directa a la satisfacción de los deseos del más desdichado del planeta Tierra. No sé cómo tendrá lugar este misterioso milagro pero a mí me da que la Providencia, esta vez, se acordará del más menesteroso de los mortales y le agraciará con un premio, con un consuelo, con una alegría que el más triste y acongojado que pisa suelo terráqueo ni se le ocurrirá que este regalo de Dios tenga lugar en su persona. Y es que no siempre son malas noticias. A veces Dios hace surgir de su seno un remedio para todos los males que acosan al deprimido, al agobiado, al atribulado que ya echa los bofes por permanecer otro día calentado por la luz temporal. Y la generosidad de Dios con esta persona que lo está pasando mal en la faz del globo va a ser infinita pues ya no tendrá que preocuparse más este hombre o mujer (pues no sabemos el sexo de este ser cercado por la miseria) de mendigar su comida, de pasar frío, de andar con andrajos o de refugiarse en albergues anónimos. El socorro llegará para este hombre o mujer en forma de dinero o quizás de una serenidad que le haga pensarse el mas dichoso hombre o mujer sobre la Tierra. Nadie sabe cómo actúa la Providencia, si con bienes materiales o espirituales. Así sea. Que Dios actúe sobre estos seres humanos que no tienen nada.

miércoles, 1 de diciembre de 2021

 La mañana trepa como una cucaña. Unos nos levantamos tarde porque no hay nada que hacer en la matutina sucesión de las horas; otros han madrugado lo suficiente para atrapar la lombriz, como hace el pájaro temprano, según dicen los ingleses. La vida corretea por encima de la piel como una culebrilla de cristal; después las ropas nos arropan la culebrilla y el frío que pueda hacer. La gente sigue erre que erre viviendo, que es lo que sabe hacer, aunque a veces, a algunos la vida les viene ancha, como una prenda que estorba las mangas abajo. La pena es no poder vivir la vida como uno quiere y tener que conformarse con el paisaje y el cielo de ayer. Pero bueno, qué se le va a hacer. Hay que dar un paseo muy largo para ir dejando detrás pensamientos torpes, aleluyas fríos y las canciones tristes de la resignación.

La vida no da para mucho si se es pobre. Lo justo para ir tirando. Madrugar es la consigna y ahorrar es lo mejor que se puede hacer por si se cruza la desgracia en tu camino.

domingo, 28 de noviembre de 2021

 Está pasando la tarde como pasa y pasamos todos, sin pena ni gloria. Ya es de noche y son las seis y veinte. Inventan inventos y a los tres días, está la gente hasta el bolo de los inventos. La gente se viste bien y la otra gente que les ve tan elegante, dice, con acierto: menudo cabrón o menuda hija de puta. Y no los vale tanta ropita de marca para dar el pego, que es lo único que hacen: pasar por gente bien. Para pasar por gente bien lo que hay que hacer es: si no haces nada bueno, por lo menos, no hagas daño. Y ahí sí que no hay trucos, pero la gente que se siente envanecida por los aplausos (no hablo de los payasos que son necesarios para una verdadera nación o de los actores o de los bomberos) sino de esa gente que se cree que va a salvar el mundo o va a cambiar la nación, esa gente que debería estar encerrada en el psiquiátrico hasta que se cure de su megalomanía, esa gente que vemos en los telediarios hablando como curas o como cristos de una nueva y falsa religión. Esos, digo, que se envanecen con los aplausos y gracias a esa gente que los aplaude se cree que tiene la posesión total de la verdad, debería irse a su casa y pasar la tarde sin pena ni gloria, sin pena ni gloria.

Esta mañana hacía un frío de mil demonios. El abrigo apenas me cubría de ese helado aire que venía por la calle. Solo he ido a comprar el periódico, que hablaba de bellacos y sus bellaquerías. No hay más que gentuza gobernándonos. Pero las horas pasan pronto y así los días y todo pasa y llegará la hora en que cambien las tornas. Es así: unos entran, adoptan unas ideas y las quieren poner en práctica. Todo sale bien o mal, según sean esas ideas y luego, vienen otros y practican otras ideas que salen bien o mal, según estas sean de buenas o malas. La vida da oportunidad hasta al más asqueroso engendro que pasaba por allí. Pero luego, todo se le vuelve en contra por eso, por ser un vil canalla que no hace más que daños. No tardando, se le verá a la camisa los hilos de que está hecha y una porrada de tiempo pondrá a cada villano en su rincón. Los días pasan, el año pasa y nosotros veremos poco a poco cómo los delincuentes y los terroristas pasarán de moda de modo que se les dará su merecido. Pues no hay gente tan tonta que repita dos veces de una ración de mierda. O a lo mejor, sí. Hay gente como las moscas, a la que le gusta mucho  la mierda.

sábado, 27 de noviembre de 2021

 Se acerca la navidad. Yo no expreso la navidad exteriormente: regalos, nacimientos y árboles. No tengo nadie a quien hacer regalos ni quiero que me hagan regalos a mí: así lo veo yo. La felicidad que viva con mis padres me vale. Y con Paco. Los demás, pueden ser prescindibles. Me da más amor mi madre o mi padre charlando y dándome algún consejo que todos aquellos que buscan en la navidad excusas para acrecentar su materialidad: un trasto más, una prenda más, un juguete más. Eso es propio de la mirada horizontal, perruna o puerca. Ya le hacemos al planeta bastante daño para que gastemos más agua y más recursos para fabricar unos pantalones o demás parafernalia de señoritos y señoritas elegantes. Además, que yo creo que la elegancia está dentro de uno mismo, no exhibiendo ropa de marca. Puedo regalar tiempo (que me sobra mucho), algo de cariño y mi propia persona. Como estos aspectos de la persona no están valorados suficientemente, pues me los guardo por si hay una ocasión de lucirlos. La gente no se ve en todo el año y no se regala presencia y cordialidad sino objetos. Pues muy bien: con su pan se lo coman. Prefiero una charla amena con los que me quieren que no un montón de baratijas con que llenar el armario. 

Se ha muerto Almudena Grandes. Es una escritora que siguió los pasos de su amado Galdós. Yo creo que era de las de pensamiento horizontal pero espero que esté en algún lado de la esfera celeste aunque sea solo por las buenas novelas que escribió.

Se pasa la tarde con los padres. Los padres cuentan cosas antiguas de cuando había fidelidad, amor y respeto por los mayores. Se cuentan historias de aquellos que criticaban a los poderosos, pero que, en caso de apuro, recurrían a los poderosos que tanto criticaban para enchufarse en una empresa o para solucionar algo con la administración. Esta gente era roja de boquilla porque tenía más que agradecer a su familia franquista que a ningún rojo. Eran gentes estas que las piaban mucho de cara a la galería y votaban a los rojos y se les llenaba la boca de encomio para los gobiernos socialistas, pero que lo que habían conseguido en sus vidas se lo debían a un tío franquista que les enchufó ya para toda la vida. Qué contradicción. Yo me he sacado la plaza de profesor yo solo, sin ayuda de nadie y a mí estos rojillos no me dan lecciones de nada. Son lo más cínico que existe en la Tierra. Menudos hipócritas. Encima tienen la mirada perruna que no llega al cielo ni a Dios. Se declaran ateos y no saben ni lo que quiere decir el ateísmo. Son gente incoherente, caprichosa y fea de alma.

 La mirada horizontal sobre el mundo es perruna o de cerdo, pues estos animales no miran nunca hacia arriba y, según la filosofía hindú, es en lo que se convierten estos humanos cuando mueren, ya que han dedicado muy poco tiempo a su alma o simplemente, no tienen alma, no mueren bien. La mirada vertical del mundo hace que se crea en un ser superior, llamémosle Dios, que nos ha creado a todos iguales. De ahí, de esa mirada vertical, nace el respeto a las demás personas, incluso a las de mirada horizontal. A estas personas que no alzan la mirada les es difícil abandonar este mundo porque es lo único que conocen: lo material, las cosas, el vil metal, los placeres y los vicios. Los de mirada vertical ven algo más allá de este mundo, son espirituales, reconocen que son poca cosa y respetan a los demás como obra de Dios que son ellos mismos. Y no hacen nada en contra de las demás personas porque las creen divinas y no se meten a hacer daño a otras personas porque lo creerían una ofensa a Dios, a ellos mismos y a las demás personas. Los de pensamiento o sentimiento vertical aspiran, al morir, a otra vida que no es esta perruna, puerca o material, el mundo de las cosas. Aspiran a que su alma permanezca, por eso son respetuosos, perdonan ofensas y se muestran buenos con los demás. 

 Hay dos modos de entender el mundo. Una manera es la mirada horizontal de verlo, solo se ve las cosas materiales, solo se ven cosas, dinero y poder sobre los demás. No se ve en esta mirada horizontal ningún reparo en hacer daño al otro si va en interés de esos que no alzan la mirada. Estas personas se declaran ateas y lo que son es psicópatas que no tienen por el prójimo el menor miramiento. Todo es susceptible de usarse y dejarlo tirado después. No hay en esta mirada respeto hacia al otro. Son gente que se preocupa muy mucho de sus placeres, como si fueran cerdos, pero se ocupan poco de lo que puedan pensar los demás. Los demás piensan de ellos que son unos desahogados, unos caraduras, pero estas apreciaciones de los demás no les importa en absoluto. Estas personas de pensamiento horizontal siempre están huraños, pensando inquinas contra el prójimo, usando a los demás, nunca están alegres, siempre tienen un mohín de disgusto en la cara porque este mundo no satisface los gustos y deseos de poder y de dinero que quisieran. Son gente falsa, que va por detrás y que va ensuciando la Tierra.

Tu vida o te la organizas o te la organizan otros que saben más que tú. Bueno. No es que sepan más que tú, sino que solo miran el interés y van a tiro fijo. No les importa que tú padezcas de esto o de lo otro o que tú pienses de una manera o de otra. Simplemente se meten en tu vida sin pedir permiso e intentan arreglártela, pero como no saben nada de tu vida, te perjudican. Puede ser la sociedad la que te organice estos líos o puede ser un familiar sin escrúpulos o puede ser alguien ajeno a ti que sabe hacerte la puñeta. Es igual quién se meta en tu vida para jodértela porque ellos (los que se meten en todo) tienen una idea del mundo bastante limitada: solo piensan en lo material, son gente que no tiene moral de ningún tipo, son gente para la que tú no eres un persona digna de aprecio sino un títere a quién manipular. Son gente psicópata en muchos casos que, una vez que te han enfilado, ya no  paran de joderte la vida, manejarte, asustarte y tenerte bajo su mandato. La pena es que son ignorantes de todo, todo lo trabucan y malinterpretan porque no saben de nada más que de lo que se toca con las manos, no tienen ética, no tienen escrúpulo al hacer el mal a los demás. Por eso te organizan la vida: porque tu vida les importa una mierda. Por eso se meten en tu vida: porque tu vida les importa muy poco. Solo les importa qué cosas obtendrán al manejar tu vida. 

jueves, 25 de noviembre de 2021

 En política hay que saber distinguir entre adversarios y enemigos. Este gobierno solo quiere enemigos. Desde la caída del muro de Berlín, hay una tendencia política que se basa en la división de la sociedad de modo que no se puede hacer comunidad entre la gente, sino que toda idea se basa en polarizar la política de modo que solo haya dos opciones: o la extrema izquierda o la extrema derecha. Todos somos fascistas en cuanto no somos feministas y todos somos enemigos en las redes sociales que están llenas de zascas: que si un diputado ha criticado a un dirigente; que si uno de la oposición ha fulminado a uno del gobierno y viceversa. Tendrían los políticos que llegar a puntos en común, pero no lo hacen. Siguen con la idea del enemigo: el que no piense como yo, es mi enemigo. La guerra de los sexos está servida. La guerra económica está servida y la guerra de las autonomías está servida. Así todos los días. ¿No habrá un político que tenga más miras hacia el futuro que nos salve de esta dicotomía fascismo/progresismo? Todos los días igual: unos se arrogan el progreso de la nación y la van hundiendo poco a poco y otros siguen dinamitando cualquier punto de encuentro. No debería ser así la política, llena de mentiras para desacreditar al enemigo, sino ver en la otra postura política una forma de pensar tan digna como la que hay en el gobierno.

 En una cacerola, he echado migas de pan duro. En otra cacerola, he puesto agua con una pastilla de caldo. He pelado ajos, que luego hay que picar fino. He cortado en daditos unas tiras de jamón: total, que voy a hacer unas sopas de ajo. Hacía mucho que no las cocinaba. Por otro lado, a mí este gobierno no me gusta. Sigue los pasos desastrosos de ZP. La nación, "discutida y discutible"; la economía, por los suelos. Apoyos de la periferia para discriminar a todas las demás autonomías. Eso es, me huele a ZP. Lo inútil y penoso que fue este dirigente, ya lo sabe la historia de España. Ahora, vienen otros a seguir su estela de bancarrota y de malestar social. Yo debo seguir a lo mío: escribir las historias que me inventé tiempo ha, caminar todos los días un poco o un mucho para mantenerme en forma y estar con los amigos para reírse un poco de la vida. Todos los malos políticos que se juntan en el congreso me dan igual: van a lo suyo, a cobrar de los españoles su sueldo y les importa poco si el AVE va a Extremadura o no va. Menudo rollo se traen los políticos. Yo creo que el 70% de la gente ya no sigue la actualidad política porque le asquea tanto rollo para nada. Bueno: voy a hacer unas sopas de ajo que no me las quita nadie.

martes, 23 de noviembre de 2021

 Tomas Moro sabía mucho de leyes, de religión, de las guerras, de literatura y fue ejecutado por Eduardo VIII por seguir fiel al papa y a la religión católica. Es un santo dentro de la comunidad católica. Escribió "Utopía", un libro que cuenta cómo se vive en una isla, en una república llamada así: utopía. Luego, el término ha sido usado más por las izquierdas que por las derechas para decir algo así como que la política sueña con un mundo mejor. Pero no. La política de hoy en día sueña con imponer sus idearios a la ciudadanía. La memoria histórica y la política de género es eso: una forma de meternos en la cabeza el rollo ese de que el sexo no es algo natural sino algo que nosotros pudiéramos elegir. Aunque esta chorrada solo se la creen los de Podemos y algunos recalcitrantes del Psoe, que hablan de sexo binario y otras gilipolleces por el estilo. Pero la verdad es que hacen mucho daño a los hombres por el hecho de inclinarse constantemente, aunque no tenga la razón en muchos casos, por la mujer. Es el feminismo rampante, es el rollo del sexo como batalla para dividir la sociedad. Y el otro rollo es ese de intentar ganar la guerra civil por medio de revisar la historia, ya que la perdieron esos nefastos rojos frente a Franco. Y por eso perdieron la Comunidad las hordas rojas, porque se empeñaron en que todo el mundo es fascista y no todo el mundo es fascista, sino que tiene el derecho de pensar como le dé la gana. Y así, la libertad ganó a la imposición de las izquierdas y seguirá ganando porque los fascistas verdaderos son el Psoe y Podemos. Y la utopía verdadera es ir por la calle tranquilamente sin que te llamen franquista o machista y poder expresar tu libertad del modo que quieras, teniendo en cuenta la libertad del otro, cosa que no hacen las izquierdas que lo quieren todo: su libertad de imponer y su libertad de guiar a la gente como si fuéramos ovejas. Pero eso es imposible porque los seres humanos, los ciudadanos, sabemos distinguir la verdad de la mentira, lo impuesto de lo que es propio de la razón, la corrección política de la libre expresión de nuestro cuerpo y mente.

 La vida del taxista es dura, como todas las vidas. Hay que madrugar mucho, al haber mucha competencia, para coger los mejores servicios. Y si después de estar una hora de reloj esperando un servicio, te toca eso que los taxistas llaman ñapa o chirifú, pues te fastidias: vas al ambulatorio por cinco euros y vuelves a la casilla de salida como en el parchís. El taxi es comparable al parchís porque depende de la suerte que tengas. Si sales de casilla para hacer una ñapa, mala suerte porque no avanza el contador (la hoja) y, para que un día te cunda, hay que hacer buena hoja de servicios, como la de los funcionarios. Hacer buena hoja supone hacer servicios de 20 o 30 euros para arriba. Si al taxista le tocan muchas ñapas en el día, se da a todos los demonios y maldice ese día porque la cartera no se llena de billetes, sino solo el monedero. Para esto del taxi es imprescindible tener unas rutinas y que esas rutinas le vayan bien al taxista. Por ejemplo, madrugar o trabajar siempre a las mismas horas y luego, dedicar tiempo a la familia. Hay taxistas que se ceban con la hoja y no ven ni a su mujer por ganar unos euros más. Eso también es malo. Dicen que los taxistas se vuelven peseteros o mezquinos, pero eso no se sabe con veracidad: puede haber taxistas generosos o que no den tanta importancia al dinero. También tienen fama de que dan vueltas en vez de ir en línea recta al destino, cuando el cliente es un chino que no tiene ni idea de cómo funciona el taxi, pero a lo mejor también es mentira. No sé. Ser taxista es complicado porque tienes que saber las calles, conducir bien y tener paciencia cuando la hoja no se llena.

 He leído un artículo sobre lo políticamente correcto. Y es que ahora, desde la izquierda, se nos impone qué debemos pensar, decir y opinar. Si vamos en contra del discurso de la izquierda, nos callarán llamándonos fascistas, machistas y xenófobos. Puede que haya un partido fascista en España, pero no se puede aplicar ese término a cualquiera que diga la verdad. Por eso, triunfó Ayuso, porque la gente eligió la libertad de decir lo que piensa sin que el nuevo comunismo le quitara la razón a base de insultos. Y por eso fracasó la izquierda en la Comunidad de Madrid, porque se puso a defender sus ideas de forma defensiva; o sea, que un montón de fascistas estaban agrediendo a los socialistas y a los comunistas. La votación demostró que esa tesis era mentira, como lo fue lo de las balas y ciertas cosas más. La gente ya estaba harta de comunismo asqueroso y votó al PP. Luego, los de la izquierda, como no tenían ya nada que decir, dijeron que había triunfado el PP de los berberechos, pero no. Ha triunfado el PP del derecho a decir la verdad sin que insulten desde la izquierda. Algo ganamos y es que ese incompetente de "coletas" se fue de la política asumiendo así que había sido derrotado por la derecha. Porque insultando al adversario no se gana nada. E imponiendo su verdad (la verdad socialcomunista) no llegarán muy lejos ni el PSOE ni Podemos pues la gente ya está harta de inventos de esa coalición asquerosa de lo políticamente correcto. Además, el presidente Sánchez ha demostrado varias veces ser un mentiroso y las mentiras, a la larga, se ponen en contra del que las articula.

lunes, 22 de noviembre de 2021

 Se despiertan todos. Unos van a la compra. Otros se quedan en casa y, por no salir, se comen a mediodía una lata. Unos fuman. Otros lo han dejado ya. Otros no tienen dinero para tabaco. Unos llevan al niño a la guardería y luego van al trabajo. Otros ni tienen niño ni tienen trabajo ni pareja sentimental ni perrito que les ladre. Unos andan atareados todo el día. Otros tienen horas por delante. Unos son una voz escuchada en la mañana. Otros tienen la voz callada todo el día. Unos se despiertan a las cinco o antes . Otros lo hacen a las 10 de la mañana. Unos hacen ejercicio, se van a andar hasta el campo de fútbol. Otros están toda la mañana sentados en una oficina o metidos en un taxi. Unos desayunan a toda prisa. Otros lo hacen con más calma. Unos escriben nada más levantarse lo que creen un monumento literario. Otros no leen siquiera una novela corta. Otros compran el periódico pero no entienden bien las noticias. Uno es el presidente del gobierno. Otro está en la oposición. Otros son ministros o ayusos que ganan elecciones. Uno es mi hermano. Otro soy yo.

jueves, 18 de noviembre de 2021

Tengo yo un sobrino nieto que no para quieto. Lo que pasa es que yo lo veo poco y no sé si será hiperactivo o no. Me dice Paco que el niño se concentra en la tele viendo animales. A lo mejor tenemos un Félix Rodríguez de la Fuente en mi familia andando el tiempo. Pero los niños cambian de gustos andando la edad. Sus padres me dijeron que por la mañana está más quieto y más concentrado con sus juguetes. La hija de mi primo Perico es muy, muy tranquila y cumplidora con los deberes de la escuela. Yo les decía a los chicos de la ESO: "Sois estudiantes, ¿no? Pues aprovechad el tiempo y estudiad para un futuro que no está tan lejano." Así deben hacer los niños hasta que llegan por lo menos a 4º de la ESO, curso que si lo aprueban, reciben ya un título que les abre ya algunas puertas al mercado laboral. Les hacía yo ver a los alumnos míos esas dos claves de su vida como participantes en la sociedad: que eran estudiantes y a eso debían dedicar la mayor parte de su tiempo y que el tiempo vuela. Si los niños llevan una vida ordenada en casa es muy fácil que vayan sacando los cursos. Yo estuve en barrios en que esa condición no se daba, había problemas familiares y se notaba en las redacciones y ejercicios que yo mandaba. Pero el buen estudiante se supera en las dificultades y saca los cursos y los títulos a pesar de todo. Más, si en su casa hay orden y buen pensar.
Me estoy leyendo otra vez "Fortunata y Jacinta", de Galdós. Es un drama que repasa la chulería de la burguesía madrileña al tratar a una "hija del pueblo" como es Fortunata. Los tenderos textiles en Madrid eran riquísimos. Vendían mantones de Manila y toda clase de género textil. Serían El Corte Inglés de aquella época. Jacinta, por su parte, se casa con un hijo de esos tenderos archimillonarios, pero no tiene hijos y los desea fervientemente. Al final, le quita el hijo a Fortunata después de muerta esta. ¿Tiene algún sentido político esta novela? No sé. Es como el abuso de las clases pudientes hacia las clases pobres. Estoy leyendo cuando el delfín (así se dice cuando un hijo va a heredar el poderío de un padre o un príncipe el trono del rey) se casa con Jacinta, que sufre mucho en la novela al igual que Fortunata. ¿Tiene esta novela un significado feminista? Puede tenerlo en el sentido de que esas dos mujeres son el juego del delfín, que en la novela se llama Juanito Santa Cruz. Galdós hace ver que la incultura y candidez boba de Fortunata la mete en mil peligros. ¿Es esta novela una defensa a favor de educar a las clases desfavorecidas? Yo creo que sí porque una persona con una educación media podría haberse salvado de la tiranía de Santa Cruz y Fortunata no sabe ni leer ni escribir. Lo deja Claro Galdós: educación para el pueblo llano.

 En el "Poema del Mio Cid" el autor de la obra dice, cuando el Cid tiene que dejar a Jimena a cargo de unos monjes de San Pedro de Cardeña: "se separaron como la uña de la carne". Luego, en Burgos dice el poeta: "burgueses e burguesas por la finiestra son / todos decían una razón/ Dios que buen vasallo si hubiese buen señor. Es muy fuerte esa metáfora pero el poeta acierta cuando hay una separación entre los enamorados. Se debían de querer mucho el cid y Jimena y así lo expresa el poeta con esa comparación tan cruda. Y la gente de la calle a veces se entera de quién es bueno o malo por las noticias que oyen y desean el bien a los dirigentes que saben hacer las cosas bien. Vasallos deberían ser todos los políticos estén al mando de un señor o no. Pero lo que hacen es llenarse los bolsillos y llenárselos a los amiguitos. La última cifra que oí de asesores de Sánchez es de cerca de 800. Los 23 ministerios de este gobierno significan también un despilfarro mientras la gente lo pasa mal. Podría ser el gobierno más austero con los tiempos que corren, pero no; los gobiernos de izquierdas, como el del inefable ZP, tiran la casa por la ventana cada vez que entran.

lunes, 15 de noviembre de 2021

Hoy Paco se ha despertado a las 11:00. Es un récord para él ya que se suele levantar a las 8 o, a veces, antes. Hay que agradecer a mi sobrino ese récord pues ha sido él el que ha llevado a su abuela a ver la geriatra a Puerta de Hierro. Ayer empecé "La madre" de Gorki. Es muy buena, está llena de tensiones y de deseos de "a ver lo que pasa". Me he encontrado a mi hermana cuando venía de la biblioteca de leer los periódicos. Me ha contado que mi madre no ha sabido decir a la geriatra cuántos hijos tiene, pero que ha sido muy certera con sumas y restas. Le han mandado a mi madre otra pastilla contra los nervios. Mi madre llora e insulta a la cuidadora. En fin, seguiremos a ver qué pasa. El sábado por la tarde, estuve yo muy mal en el "tú decides". Discutí con Paco porque quería un chuletón en vez de la mariscada. Yo ya le dije que lo que encargamos era una mariscada, pero la mala leche venía de antes, de lo que pasó con mi hermana y mi cuñado y lo de la mudanza. pero lo más importante de este lunes es que por fin, me siento a escribir mis historias que tenía abandonadas desde antes del verano. Voy a ver qué me sale.

domingo, 14 de noviembre de 2021

Me estoy leyendo "Utopía", de Tomás Moro. En ese libro, se habla de una isla llamada así. En ella, los habitantes solo gastaban un vestido de lana y otro de lino: invierno y verano, respectivamente. Y dice el libro que no eran más ni eran menos por vestir de este modo. No tintaban la lana y el lino era siempre blanco. Hoy en día, se da excesiva importancia a la imagen: el ir presentable o llamando la atención por medio del ropaje. Es otra esclavitud del ser humano en este mundo loco. ¡¡¡¡Cuántas páginas se han derrochado en contar cómo iba vestida la reina!!!!! En fin. Yo no es que vaya a la moda, es que voy muy simple de vestimenta. Pero no soy más ni soy menos por ir así. Ya decía Machado que le perdonaran "su pobre aliño indumentario". Hay gente que de ir bien vestido hace religión. Pero la realidad de la gente no es en cómo viste sino en sus acciones con los demás.

Dice un filósofo muy viejo que lo que hay que ser es buena persona allá donde vayas y punto. Yo me apunto a esto y prescindo de elegancia, presuntuosidad e imagen.

 Si pienso la vida de mis padres, me asombra el montón de circunstancias extrañas a las que debieron adaptarse. Desde que nacieron, todo fue cambio. Nacieron en el 30 más o menos. Pasaron la posguerra y luego, todo fue cambio en España. Más o menos nos pasa ahora a las generaciones posteriores a ellos: vamos a una digitalización y a una modernidad en la que yo, por lo menos, me siento muy chiquitito. Ayer mismo, al ver en el autobús cómo manejaban los jóvenes el móvil, me quedé asustado. Hacían greguerías con fotos, con historias y con otras aplicaciones que yo ya no entendía. Es la fuerza del paso del tiempo y con él, la llegada de otras modas y otras costumbres que nos hacen quedar atrás. A lo mejor, ser astronauta, en unos diez o quince años, es una profesión normal, si no lo es ya.

He pasado unos días agitado. Con insomnio. Con mal humor. Con penalidades mentales. A ver si hoy es el día en que desaparecen esos extrañas compañías de mi mente y duermo y siento mejor las cosas.


Hoy cumplimos Paco y yo 52 años. Celebraremos que estamos vivos de manera muy discreta. De pequeños fuimos a la Manga del Mar Menor y allí vimos por primera vez el mar. Nos han pasado cosas tremendas en estos tantos años. Pero hemos sobrevivido. Paco y yo intentamos haber sido docentes. Nos hemos tenido que retirar de nuestros trabajos. Llevamos una casa y yo he escrito unas cuantas novelas. Los que han estado cerca de nosotros nos han ayudado. Hace un mes, Paco me decía: "tengo 52 años y ni me he enterado". Es verdad que el tiempo pasa rápido, hagas muchas cosas o hagas pocas. Luego seguía diciendo Paco: "estamos de paso. Esto es un tránsito". El mundo es un tránsito, un caminito que hay que recorrer. 

Esperemos pasar este domingo con alegría, pasar bonitos momentos Paco y yo comiendo una mariscada y paseando por Las Rozas. ¿Somos aún jóvenes o ya vamos para viejos? Yo creo que la juventud se lleva dentro cuando uno tiene ganas de hacer cosas y pasarlo bien.

Paco y yo, después de todo lo que nos ha pasado, pretendemos ser discretos y no hacer grandes alharacas sobre nuestro cumplimiento de años. Solo pasarlo bien y reírnos un poco.

sábado, 13 de noviembre de 2021

 Ya tengo la lombarda cocida. He picado ajos y los he echado a la olla con aceite. Solo falta echar un poco de pimentón y a comer. Plato único. Si a la tarde hay hambre, se come uno un bollo o un sandwich. Yo soy un espíritu libre que tiene derecho a decir la verdad. Aunque sonría, no soy feliz. La vida es como ese hombre de la acera que pide perdón por pisar a un perro. Si pidiéramos perdón más a menudo, nos iría mejor. Hay que perdonar también las ofensas, las ofensas de esos que piensan solo en horizontal. La gente de hoy en día se refugia en El Corte Inglés como antes lo hacía en las tabernas y antes, en las catedrales. A cada tiempo, su creencia. Con estos bueyes tenemos que arar. La ropa mueve montañas de dinero, ya lo dice Galdós en "Fortunata y Jacinta" que es la historia del hijo de un tendero riquísimo. La pena del mundo circula como moneda trasnochada: no hay más que pobres pero lo peor son los pobres de espíritu. El hambre es un delito en el siglo XXI, pero la policía del mundo no lo ve así. 

viernes, 12 de noviembre de 2021

Yo no he leído "La Madre" de Gorki, pero sé que Gorki participó en el aquelarre comunista de la Unión Soviética, así que mandaría matar a algún que otro intelectual que no comulgara con el socialismo infecto que recorrió ese país matando zares y patriotas que se enfrentaron a ese monstruo del comunismo. En España se venció al comunismo y menos mal. La baja extracción social de los rojos en España hizo mucho para que no ganaran la guerra civil española. Franco no sería muy leído, no lo sé con certeza, pero sabía lo que quería: Madrid. Y Barcelona. Y Valencia. Y fueron cayendo una tras otra en batallas infernales como la de Teruel o Belchite. A mí no me gusta el comunismo y ojalá que en Cuba empiece la disidencia, como en China, como en Corea del Norte o en Bielorrusia. Esos regímenes son asquerosos, cínicos; solo viven bien los que aplauden a Fidel o a su hermano o al imbécil de Maduro. Bueno. Aquí, en España, tenemos esa calaña en el gobierno. Son los antisistema, los que quieren asaltar los cielos. Y luego son unos pijos señoritos de papá que no pagan a la asistenta, que cobran sueldos de universidades sin pisarlas, que cobran de estados crueles como Venezuela o Irán, que tienen más líos financieros chuscos: una pandilla de delincuentes.

 Bembibre es una ciudad del Alto León, en la zona del Bierzo y "El señor de Bembibre" es una novela histórica de amoríos y Templarios. Yo, si estuviera ahora mismo en Bembibre, me iba a la plaza del ayuntamiento, donde supongo que habrá bares y me tomaría un descafeinado. Después, visitaría las iglesias que quedan en pie y que los rojos de la revolución del 34 dejaron sin quemar, me prostraría ante la figura de Cristo o de la Virgen y estaría así en silencio frente a esas figuras que fueron humanas y divinas, media hora más o menos. Conozco una señora berciana muy maja y simpática que nos ha ayudado a los enfermos mentales de la asociación y conozco a Fernando Yubero, que también es de la zona de Ponferrada. Yo en Ponferrada no he estado nunca, pero puede que algún día esté.

Ahora, me voy a acordar de mi primo Perico, cuya calmosa prosopopeya le salvará de sus padecimientos y me acuerdo de mi sobrino nieto, al que le gustan los osos, los leones y las cebras. Me parece que la mujer de mi sobrino el mayor está opositando. Ojalá consiga plaza y se asegure un sueldo. Me acuerdo de mis padres, que, según ellos, tienen la carrera hecha y los deseo larga y buena vida. Y me acuerdo de Paco, mi hermano gemelo, que es mi asistencia en todo tipo de turbulencias nerviosas de mi mente.

jueves, 11 de noviembre de 2021

Paco y yo hemos ido a Las Rozas y hemos vuelto andando. Recuerdo los días de verano en que Paco estaba muy gordo y enseguida se ponía a sudar y se cansaba cuando andaba unos pocos pasos. Paco ha recuperado la fuerza y ya puede hacer ejercicio. Paco ahora también se muestra muy reacio a conducir porque dice que le cansa mucho. Tendremos, en un futuro próximo, que recurrir al transporte público si queremos trasladarnos. Nuestra enfermedad quizás lleve otras enlazadas como el hígado graso de Paco y el cansancio. No en vano tomamos pastillas a diario que deben ser malas para el hígado, riñón, etc.

Bueno. Espero que estos dos meses que quedan para acabar el año sean buenos para todos y nos lo pasemos bien y no nos pongamos nerviosos y los vivamos felices y con esperanza de mejorar en todos los ámbitos de nuestra vida. 

Estos días de atrás he estado muy nervioso. Estaba yo en Colón con mis amigos y vino Paco y me contó que mi madre había insultado a la cuidadora. Yo ya veía un horizonte malo en mi casa y me preocupé. Luego, me salió un bulto en la cara interior de la mejilla y me puse de los nervios porque creía que sería un cáncer o algo así. Me puse aún más nervioso y así, dirigí mis envenenados dardos contra mis sobrinos, que, pobrecitos, no tienen culpa de nada. Ya he borrado y/o eliminado los blogs en los que yo insultaba a mis sobrinos. Precisamente, fui a la farmacia a por mis medicamentos y me atendió la más joven, que es la más lista, y me dijo que no me preocupara de los bultos en la boca y me dio una muestra con un gel y me lo di por la noche y se me quitó el bulto. Ya me sentía mucho mejor. Hoy por la mañana y por la tarde hemos estado Paco y yo en casa de mis padres y mi madre estaba tranquila, menos mal y eso me ha dado ánimos y espero que Sara, la marroquí que ahora está en mi casa, dure más que las otras, porque es muy buena persona. 

He estado metiendo temas de oposición en una carpeta gigante. Recuerdo que en un examen de oposición me tocó la poesía del siglo XX española. No lo hice tan mal porque saqué un 5. En la exposición del tema me tocó la semántica y saqué otro 5. Eso dio para que me llamaran de profesor y así mi vida pegó un cambiazo grande. Al lazarillo le tocó servir a un ciego que le dijo ante una cabeza de toro de piedra que hay adornando el puente sobre el Tormes en Salamanca: "pega la oreja a la cabeza del toro y oirás gran ruido en ella." Cuando Lázaro hizo esto, el ciego le dio una calabazada de la cabeza de Lázaro contra la del toro. Pero todo se resolvió al cabo de un tiempo cuando los dos pasaban por una ciudad y llovía. Lázaro dijo al ciego: "aquí hay un gran riachuelo: dé un gran salto y no se mojará". En realidad, Lázaro puso al ciego enfrente de una pared y el golpe que se dio en la cabeza probablemente le mató al ciego. La venganza es triste, pero es venganza que se aprende después de muchas putadas. No nos dice el autor si el ciego murió, pero sí que Lázaro le dio por muerto. Tristes días aquellos en que las cosas se resolvían así de cruelmente. En la vida de hoy en día, también hay venganzas y tristezas, pero muchas otras cosas se resuelven hablando.

 "Gira el mundo gira" dice una canción. Claro que gira. Me dijo un día Venancio que el tiempo no se distrae con nadie, como hacemos los seres humanos, que nos distraemos a charlar mientras vamos con un objetivo por la calle. Por ejemplo, vamos al ayuntamiento y nos cruzamos en el camino con un amigo y ya nos ponemos a charlar y tal. Eso no lo hace el tiempo. El tiempo sigue y sigue. Venancio ha muerto. Le dio un jamacuco en su casa y murió. Venancio daba vueltas por las calles del pueblo, entraba en los bares y no solía hablar mucho. La gente que habla mucho, mucho se equivoca. El sol sale para todos pero los humanos nos encargamos de hacer la puñeta a nuestros semejantes aunque el sol salga para todos. Es así. Dice una conversación entre dos: "dicen que se iban a repartir las riquezas". Contesta el otro: "yo me conformaba con que se repartiera el hambre". Las riquezas son un punto muy conflictivo en la vida del hombre; el hambre, no tanto porque cada ser humano tiene su hambre y no la puede evitar. Todos tenemos hambre, no todos tenemos riquezas de índole material. Sería más justo que se nos saciara el hambre en vez de la sed de riquezas.

 No me centro en mis escritos y en casi nada de la casa porque lo de mis padres me pone nervioso. Que oiga yo cosas de que mi madre se ha puesto a insultar y dar voces me pone mal. Estar un fin de semana con ellos la aguanto, pero me distrae de lo que yo solía hacer, que era escribir y leer. Me estoy leyendo "Utopía" de Tomás Moro, hombre que fue ejecutado por Enrique VIII. He empezado a leerlo y me doy cuenta de que en aquellas épocas, la gente vivía para y por las guerras innumerables que había en los países. A los ladrones simplemente se les colgaba en la plaza pública de veinte en veinte. Los enfermos y los viejos no tenían amparo alguno. En fin, nos quejamos de que vivimos mal, pero si miramos 300 años atrás nos deberíamos dar con un canto en los dientes. Mi primo Perico es un hombre al que la calma le recorre el cuerpo como un traje del Corte Inglés, con mucha elegancia. Esa calma inusual  en las gentes le vendrá como anillo al dedo para superar su enfermedad. Mi sobrino Carlos estará viendo los avances que hace su hijo y se sorprenderá aún más cuando el niño se ponga a hablar y diga cosas inimaginables para un adulto. La vida nos trae sorpresas como una curación, como un niño que empieza a hablar o un aparato que lanzan a Urano.