En la vida hay veces que el tiempo pasa rápido y otras en que pasa demasiado lento. Cuando uno no sabe qué hacer, el tiempo pasa muy, muy lento. Yo ahora pasaría el rato fumándome unos cigarritos pero como no puedo, el tiempo pasa lento.
Escribo esto por puro ocuparme en algo. Esto que escribo no tiene ningún valor anecdótico en su contenido si no es que vale para entretener el hecho de que tengo ganas de fumar y no puedo y estoy poniéndome bastante nervioso.
Al final, me tendré que fumar un cigarro porque no puedo más. No sé dónde poner la cabeza ni las manos y estoy perdiendo la calma.
Me propuse no fumar y hago lo posible para cumplirlo pero llevo ya más de una hora que estoy bastante intranquilo y no logro relajarme y sólo pienso en el puto cigarrito y creo que me lo voy a fumar.
Por uno da igual. Llevo toda la mañana en que me he fumado uno a las once de la mañana. Por fumar otro no creo que pase nada en mis planes de dejarlo. Me calmaré y podré seguir con la idea de dejarlo. El aburrimiento es mortal para dejar de fumar. Hay que estar siempre haciendo algo para no fumar. Que no existan muchas horas muertas frente al aspirante a ex fumador.
Si te aburres demasiado, caerás en vicios malsanos.
Si te aburres demasiado, caerás en vicios malsanos.
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