Acabo de llegar a casa de ver un grupo joven majariego tocar en un escenario ya que son las fiestas. Mi novia y yo hemos oído unas cinco o seis canciones. Me ha gustado una que decía el estribillo: quiero volar como un angelito gordo y hermafrodito o algo así. Luego la banda se ha metido con la jerarquía en una canción llena de libertad y de corrupción. Nos hemos ido. Me ha gustado de esta banda que tuviera dos saxofones y dos trompetas. Le daban un aire insólito y original y cuando sonaban, lo hacían bien, me molaba. Han tocado blues, rock y swing. Ha molado. La noche estaba llena de lolitas que iban de allá para acá moviendo sus cuerpecitos lindos y agitando sus bolsos. La noche sonaba bien, la noche se vaciaba en una fiesta. Lástima que nos hayamos tenido que venir. Al llegar a casa he visto que había muchas visitas al blog. Ignoro la causa. Quizás haya tocado temas sensibles pero me da igual. Como en mi casa no se puede hablar pues lo hago en el blog y me quedo tan a gusto. Lo que no se cuenta explota por algún lado. Por eso yo lo cuento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario