Está visto que una vez pasas de los cuarenta, ya no haces amigos y si los haces no son muy duraderos. Es normal. El ciclo vital de hacer amigos va desde la infancia en que se compartían juegos y luego en la adolescencia en que se compartían horas en la barra de un bar y luego en la juventud hasta los cuarenta en que se compartían los recuerdos de esa adolescencia feliz. Luego ya nada. La gente se casa, tiene hijos, se establece en un determinado lugar para vivir en familia y de ese núcleo ya es muy difícil salir. Se sigue teniendo amigos (los de la infancia, los de la adolescencia) pero ya no es lo mismo. Lo que yo digo es que con las noticias que nos asaltan de hombres que matan mujeres o de tiros que hay por ahí, ¿quién quiere hacerse amigo de nadie? ¿para que queremos más problemas de los que ya tenemos echándonos un amigo que es alcohólico, ludópata, se ha divorciado y está como una cabra porque ha salido mal de esa separación, etc, etc, etc. Según está la sociedad de viciada, desorganizada, alocada, ¿para qué queremos amigos viciosos, desorganizados y locos? Esta sociedad no fomenta cosas buenas como la amistad porque la amistad requiere una estabilidad, una tranquilidad que no hay.
Si quieres un amigo, ese del espejo.
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