Es malo salir a la calle con este polvillo naranja que ha venido y más si haces ejercicio físico. Puede provocar males a los ojos y a la respiración. Por eso, cuando he ido a dar un paseo con Paco no había casi gente por la calle. Será porque la gente lo sabe. Otro motivo para la reclusión interna en casas como si no hubiera ya otros motivos como la pandemia, la depresión por la pandemia, la depresión por la guerra ucraniana o la depresión del bolsillo. Esto se está pareciendo a las siete plagas de Egipto o las señales del apocalipsis. Unidas unas a otras no dan ganas más que de taparse cabeza y todo y no salir de casa en un par de meses a ver si esto cambia. Pero no cambia. Es como el chiste de aquel que estaba triste porque no entendía a su mujer. Había puesto esta un post-it en la nevera que decía: "lo siento Manolo. Me voy porque esto no funciona." Y Manolo había estado mirando todos lo sitios de la nevera y daba un frío de la ostia. Así que no entendía a su mujer.
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