Yo creo que en política no hay que votar a lo bueno, no hay que aspirar a eso ya que no existe, sino votar lo menos malo. En estas elecciones en Italia se ha visto que todo estaba cuarteado, no había ganador claro. El populismo es mala cosa para la política porque se basa en promesas falsas y especulaciones sobre posibles actuaciones que si tuvieran lugar, no serían demasiado buenas, como la salida del euro, con la que especulan y juegan para atraer votos mediante el sentimiento.
Lo malo de una política como la italiana (demasiado populismo) es que la gente habla demasiado de política en las comidas y la gente no debería hablar tanto de política.
Aquí en España ya tenemos unos populistas que son los de Podemos y ojalá que no haya ya no más porque dan demasiado que hablar y están todo el rato quejándose y fusilando a Franco muerto.
En Europa, la tendencia es esa, que los partidos de siempre se debiliten y surjan partidos que prometen cosa ilusorias y estúpidas y siempre se están quejando y acusando a los demás partidos.
Pero bueno, que formen gobierno como sea y que hagan las cosas conforme a la razón o la poca razón que les quepa en su cerebro.
Cuanto más hables de política, menos entenderás de ella.
No hay comentarios:
Publicar un comentario