martes, 2 de febrero de 2021

 Carlos Sahagún: nació en Onil (Alicante) donde vivió hasta que se fue a Madrid a estudiar filología románica. Luego dio clases en Inglaterra, en Segovia, Barcelona, etc. Obtuvo premios poéticos. Sus temas son el paso del tiempo, la dorada infancia perdida y ciertos toques oníricos.


                                               EN EL PRINCIPIO


En el principio, el agua

abrió todas las puertas, echó las campanas al vuelo,

subió a las torres de la paz-eran tiempos de paz-,

bajó a los hombros de mi profesor

-aquellos hombros suyos tan metafísicos,

tan doctrinales, tan

florecidos de libros de Aristóteles-,

bajó a sus hombros, no os engaño, 

y saltó por su pecho como un pájaro vivo.

(...) Del poemario "Profecías del agua".


A lo largo del poema, se van refiriendo dos épocas: la de la infancia o la del pasado antes de la guerra en que todo era puro, todo estaba bien hecho (Jorge Guillén), era "inocente amarse desesperadamente" "Los niños se proclamaban hijos de la alegría, / hermanos de la yerba más verde". Así va cogiendo pedazos de naturaleza y de la sociedad que era libre y feliz (no sabemos si corresponde a la infancia del poeta o a un pasado antes de la guerra. Al final del poema dice: "cuando entraron los lobos, después, despacio, devorando, / el agua se hizo amiga de la sangre".


Me ha gustado mucho este poema, aunque es triste, por el valor que se le da al agua. El agua es protagonista del poema como un mensajero de la felicidad.

Me ha gustado el verso: "el agua contraía matrimonio con el agua".




No hay comentarios:

Publicar un comentario