Damos paso al mes de diciembre. Hay movimiento social en la calle. Médicos, deshauciados, trabajadores de todo tipo, gente que no está conforme con la política en general, profesores y estudiantes universitarios están en la calle para decir que no hay dinero para ellos o que van a ser privatizados sus centros de trabajo o que no hay pan para tanto chorizo o que no quieren pagar la deuda contraída con los alemanes. Pero eso es lo que hay: una deuda feroz y un montón de parados. La economía, con tanta deuda, no va. Hace ya tiempo que las grandes empresas pensaron que España no es un país serio aunque haya organizaciones que piensen que las grandes empresas les roban, les humillan, les explotan. Yo creo que esos que se han puesto ahora a pensar no pensaban antes de tal modo y ni el gobierno ni las empresas ni los políticos les humillaban; ha sido sólo cuando ha faltado dinero cuando han pensado esas cosas. La enseñanza pública, los hospitales también piensan mal de la política pero cuando ha faltado dinero para su gestión. No en vano hay menos contribuyentes que trabajan para pagar todo lo que hay que pagar. Ya lo dijo Quevedo: poderoso caballero es don dinero. Y también hay un refrán que dice: cuando no hay harina todo es mohína. Es como si no tuviéramos dinero para un bocadillo porque hemos pedido prestado un montón para comprar un coche y tenemos que pagar lo prestado y no podemos comernos el bocadillo. Todo es muy simple, aunque los diarios nos lo hagan ver muy complejo con números y primas de riesgo y PIB. En España se ha despilfarrado el dinero que no teníamos y ahora luchamos por los servicios básicos a ver si se pueden salvar sin dinero. Pero sin dinero no hay política ni nada que funcione en este perro mundo nada más que silbar, ayunar y cantar para espantar el mal.
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