miércoles, 20 de noviembre de 2024

Cuando nos quejamos, debemos hacerlo con sordina. Quiere decir con sordina que lo hagamos levemente, no sea que creamos que somos los peores tratados en este mundo. Si observamos un poco los medios de comunicación veremos que hay mucha gente colgada por las adicciones, por enfermedades duras de llevar como el ELA, por relaciones familiares tóxicas y perniciosas difíciles de quitarse de en medio o denunciar, por relaciones tóxicas de pareja en las cuales, uno abusa de la otra pareja, por motivos laborales de explotación que son difíciles de revertir, etc., etc. Antes de quejarnos, veamos cómo está poblado este mundo de explotadores, abusadores, trileros que nos engañan y nos arruinan en una estafa, de malas personas. Si no has padecido algo de todo esto, si eres feliz en tu familia a pesar de los esfuerzos que conlleva, si no sufres estos casos que pongo arriba y otros muchos que hay de injusticia social, laboral, matrimonial, etc., quéjate con sordina.

El mar es muy grande, no se puede abarcar con la vista.

Así el género humano. La vista sola no alcanza a ver su dimensión entera.

 En este mundo hay una cantidad de pareceres inabarcable para el ser humano individual. Puedes encontrarte con un señor que cree en la virgen de los desamparados y luego, por influencia de sus padres, que crea en el psoe, cuando el psoe no es muy tendente a la religión. O puedes encontrar un señor del pp que es ateo. No hay que encasillar a la gente sino tratar con respeto sus convicciones y asumirlas en lo posible. Para mí, la única excepción que no tolero, es creer en la violencia. No me gusta la violencia ni los que creen en ella, sea esta física o verbal. La violencia solo crea más violencia y puede esta llegar a una espiral que ni el mismo violento controle o desee ya porque ha ido muy lejos. Pero el violento la ha iniciado. Me gusta el legado que Gandhi dejó en la política y en la religión: la resistencia pasiva. Hay que resistir a la opresión y al abuso, pero sin violencia. Yo leí la vida de Gandhi y me asombró y me gustó y veo que es buena la teoría que llevó a la práctica.

Somos españoles, somos europeos, somos orientalistas, somos devotos de un santo, somos lo que no se sabe.

Porque el ser humano es muy complejo.

 Ayer vi en el autobús a una chica que se pintaba los ojos. Era muy guapa. Luego vi cómo se quitaba un par de zapatillas azules y se ponía unas zapatillas blancas que sacó de una bolsa. Antes, en la parada del autobús, vi un chico joven leyendo poemas que tenía una camiseta que en el lado posterior, el de la espalda, se veía dibujado un vampiro de color rojo que mordía a una joven pudorosa. A mi izquierda, también en la parada, oí a un chico que decía: you can impress, quería decir can´t pero no pronunciaba la "t". Y así me monté en el autobús y fui viendo un chico con un corte de pelo realmente raro, rapado un lateral con rayitas que mostraban la piel del cráneo y vi una mujer muy gorda que iba con una maletita de madera, de esas antiguas que llevaban pinceles y pinturas. El mundo es un universo de color y de vida que no alcanzamos a comprender en una vida que estamos en él, tendríamos que vivir tres vidas para hacernos una idea de lo que habita en él. Y de su importancia fuera ya de creencias o fidelidades a ideas que lo tergiversan todo.

Sonaban canciones, sonaban en las canciones diversos dolores,

sonaba el eco de la tierra madre, sonaba la luz y sonaba la gente.

 En esto de hacer blogs debe de haber un orden, como en todas las cosas, pero a veces uno empieza y no sabe cómo acabará porque se da uno a la improvisación. Si la improvisación es buena, no hay problema. El problema es que te salga un churro de blog. Lo que voy a tratar es de la intuición de las personas que, a veces, tiene mayor poder que la razón y la fe. Yo intuí, en mi última oposición de la que me examiné, que conseguiría plaza y así fue. Otros intuyen que han de apuntarse a una ONG o algún partido político, que serán útiles una vez dentro de ese tipo de organizaciones. Otros tienen la intuición de que serán felices con una familia extensa. Y tienen 5 hijos, yendo en contra de la economía vigente. Y es que, teniendo una intuición, que es como una creencia pero más primitiva, nada te detendrá. La intuición es propia de animales, pero es que el ser humano tiene todavía mucho de animal cerebralmente. El ser humano actúa a veces con un impulso que no es creencia ni fe, sino un deseo que lo vence todo, un deseo vital, un deseo que es intuición.

Tras siglos y siglos de estar el ser humano en la Tierra, 

todavía ese ser humano se guía por intuiciones, por creencias no organizadas mentalmente.

 En la vida, no se puede mantener una creencia cerrada, a pies juntillas, sin tener el menor deseo de racionalizar esa creencia de cuando en cuando y darle un poquito de crítica. Así podemos también enjuiciar otras creencias y no creernos que creemos en la verdad absoluta. Así pasa con el que cree en la política de forma cerrada y piensa que todo en el mundo es política: estará equivocado. O el que crea que lo mejor de la vida es tener una buena imagen exterior: también estará equivocado si no somete esta creencia a que sus coetáneos puedan no creer en tener que vestir de forma maravillosa y elegante. Y así todo. Yo, por ejemplo, le doy a la política el interés que tiene y no más. Y encima, la critico por no crear más que líos en la vida pública como ha creado la gota fría de Valencia. La vida no es para creer en esto y en lo otro a ultranza, porque está demostrado que es un error, sino que cada fe que deposites en algo, debes someterlo a crítica porque no todo el mundo piensa lo mismo que tú ni mucho menos.

Flores y libros y sábanas y puñales y pistolas y fusiles:

De estas cosas está hecha la vida, de cosas distintas, para que seamos distintos y creamos en varias cosas, no solo en una.

lunes, 18 de noviembre de 2024

 Hoy habrán nacido niños, unos cuantos. Los niños dan alegría y ganas de cogerlos, de hacerlos muecas divertidas, de amamantarlos, de limpiarles los mocos, de besarlos; así hasta que se hacen mayores. Cuando empiezan a andar hay que tener mucho cuidado con ellos, pues no tienen miedo a nada. Hay, por lo tanto, que meterles el miedo  a los coches, a los enchufes, a los productos farmacéuticos que saben a fresa, etc. Los niños pequeños que nacen nuevos no saben nada. Solo que su madre significa comida. Luego van aprendiendo normas, modos de conversar, qué está bien y qué está mal. Y ojalá no cojan una adicción de mayores porque en España, las adicciones se cogen con facilidad.

Todos fuimos niños.

Todos empezamos a distinguir lo malo de lo bueno. O casi todos.

domingo, 17 de noviembre de 2024

 Que la flor, el verso bueno y la buena voluntad quepan en la Tierra para que Dios se sienta oído. Que todo suceda por una causalidad benigna, que nada surja de un azar estúpido. Todos debemos controlar lo que tenemos y hacemos, lo que nos distingue de los demás y no ser como piaras de cerdos, todos mirando hacia abajo. El dinero es bueno tenerlo por si surge cualquier evento malo, pero no creer más que en el dinero no es bueno. Creamos en los que tengamos al lado, a los que hay que favorecer para que sigan siendo familiares y amigos. En la familia se cometen el 70% de delitos y son más callados, más ocultos. Que salga a la luz el abuso de poder o de otra clase en la familia y empezará a curarse la herida abierta en el inocente.

Tú persistes en la Tierra, tú mandas, tú eres poderoso.

Haz que el inocente salga a flote en medio de sus enemigos.